La renovación de Rubén Baraja, ahora sí, esta a punto de cerrarse. ElDesmarque ya adelantó que esta semana iba a ser clave en las negociaciones tras la pasada, en la que el tira y afloja en lo económico hizo que no se cerrase. Ahora, los últimos contactos han provocado que en el seno del Valencia CF el optimismo haya crecido, está a punto y solo queda la llamada definitiva de Manuel García Quilón, el agente del Pipo, para instar a las partes a plasmarlo todo negro sobre blanco.
La oficialidad de la renovación de Rubén Baraja será tan pronto como este último aspecto se dé. Puede ser la semana que viene y, de hecho, sería lo ideal para que el Valencia CF avanzase definitivamente en otras operaciones que tenía en el tintero a la espera de cerrar lo del Pipo.
Sin embargo, la palabra que reina en el club es la de "calma". Saben que el ruido o ese tira y afloja del que se hablaba la pasada semana desgasta de forma excesiva la negociación. Por eso, pese al optimismo con el que viven las últimas horas con la renovación de Baraja, prefieren ser precavidos.
El optimismo en el seno del club a viernes 14 de junio es evidente, pero desde el entorno de Rubén Baraja, según ha podido confirmar ElDesmarque, todavía no ven tan cerca ese acuerdo final en lo económico. Eso sí, como desde el inicio de la negociaciones, son conscientes de que todos los caminos llevan a esa renovación.
¿Qué se quiere decir con esto? Puede pasar que esa llamada que espera el Valencia CF por parte de Martín García Quilón no tenga por qué ser para dar un sí rotundo. Hoy todo está más cerca que ayer, por así decirlo, y las negociaciones siguen. Llegará a buen puerto y en las próximas horas habrá noticias claves.
Desde el primer momento, la respuesta de Rubén Baraja ha sido la misma, como ya avanzó en exclusiva ElDesmarque: un sí quiero rotundo pero con tres condiciones. La primera tenía que ver con un aspecto contractual: extender su vinculación solo un año más, hasta 2026. La segunda, con tener unas mínimas de un equipo competitivo la próxima temporada.
Y es en la tercera, el salario, donde ha habido diferencias con el Valencia CF. El club le presentó una primera oferta, pero la contraoferta Manuel García Quilón hizo que se hablase de ese tira y afloja. Más que nada, porque se alejaba de lo que quería la entidad en un principio. Finalmente, a expensas de esa llamada definitiva, todo ha llegado a buen puerto. Y es que pese a la lejanía inicial de las posturas en este último aspecto, el optimismo siempre ha sido grande porque la voluntad del Pipo siempre ha sido la misma.
Se lo merece por lo grande que es por lo valencianista que es aunque vallisoletano de nacimiento valenciano de adopción y quiere mucho al valencia cf