García Pimienta quiere construir, junto a Víctor Orta, su propio Sevilla. El que fuese técnico de Las Palmas, que está en contacto directo -casi diario- tanto con el director deportivo como con José María del Nido Carrasco, presidente, sigue atentamente la evolución del conjunto blanquirrojo en el mercado de fichajes y ya le ha marcado al encargado en materia de fichajes un cambio de ritmo para la plantilla.
Fue el propio Víctor Orta el que, en su última comparecencia ante los medios de comunicación, explicó el perfil de fichajes que ha solicitado García Pimienta. "El perfil de futbolista lo tenemos claro: repetición de esfuerzo, agresividad, control de balón... Arriba, el entrenador quiere mucha velocidad, y también atrás, porque la defensa la coloca en el centro del campo".
Es evidente que Pimienta ha detectado rápidamente los déficits de la plantilla blanquirroja. Si algo echó en falta el Sevilla el pasado curso fue esa chispa de velocidad, no solo en ataque, sino también en defensa.
En el aspecto ofensivo, solo Isaac Romero y En-Nesyri, además de Lukebakio, metían prisa en ataque, ya que jugadores como Ocampos, Óliver Torres, Lamela o Suso contaban con otras muchas características, pero no con la velocidad como su fuerte.
En defensa, la historia era semejante. Mientras los laterales sí metían velocidad (aunque ellos podrían acercarse más al tema ofensivo), en la zaga ninguno de los futbolistas presentes tenían una velocidad punta destacada.
Mientras Agoumé-Soumaré se presentaban como un mediocentro más posicional que de potencia-velocidad, jugadores como Sergio Ramos, Nianzou, Marcao, Kike Salas e incluso Loic Badé, en cuanto se alejaban del área, sufrían a sus espaldas. Pimienta necesita más chispa.
Sin ir más lejos, hasta José Luis Mendilibar, que prometía que la altura de su defensa era innegociable, sufrió para sacar a sus centrales de atrás. La razón no era otra que el temor a ese déficit existente.
Es por ello que una de las grandes cualidades que busca Víctor Orta en el mercado es la velocidad, ese cambio de ritmo para su plantilla. Pimienta no quiere que su Sevilla sea un equipo monótono, pausado, lento, sino que quiere contar con las herramientas perfectas para, cuando sea necesario, exprimir el espacio, arrancar a la espalda.
Ejuke, por ejemplo, viene con dichas sensaciones (además del regate, situación clave cuando el Sevilla domine la pelota y necesite romper líneas), Peque, otro de los que está encarrilado, llega con dicha condición. Pimienta lo ha dejado claro, ha pedido ese chip y Víctor Orta, y su equipo, parece que lo tienen claro.