El futuro de Brian Ocampo pasa por el Cádiz exclusivamente. A pesar de que en los últimos días el presidente de Nacional, Alejandro Balbi, está metiendo una máxima presión a nivel público para llevarse al extremo, en el club cadista están muy tranquilos porque el jugador tiene contrato hasta 2026.
"Me junté con Ocampo en Estados Unidos, previa autorización obviamente. Él quiere venir, hasta podría decir que está desesperado por venir, pero su pase pertenece al Cádiz, un club que pagó mucho por su ficha. Normalmente estos casos se resuelven más sobre el cierre del período de pases que sobre el principio, pero estamos hablando con su representante. Su deseo es el de volver a Nacional, pero es consciente que depende de su club", ha dicho Balbi.
Y lo que se va a encontrar Ocampo cuando llegue al Cádiz a finales de este mes es la decisión firme de que sea uno más para el entrenador, Paco López. El Cádiz hizo una fuerte inversión en el uruguayo hace dos campañas y ahora necesita que dé un paso adelante en una temporada en la que necesita de su calidad para afrontar la complicada categoría tras el descenso.
El Cádiz ha apoyado al jugador al máximo durante el largo proceso de recuperación de su lesión y se ha mostrado de lo más comprensivo cuando pidió irse a su país unos meses para estar más arropado con su gente. Después, cuando ya tuvo el alta médica, tampoco le metió presión para que jugara por mucho que estuviera en juego la permanencia.
Ahora, después de haber acudido a la Copa América aunque sin tener minutos, llega el momento de que Ocampo devuelva al Cádiz en el campo todo eso. Durante media temporada demostró que es un jugador que puede marcar diferencias por su desequilibrio y debe estar centrado en hacerlo con la camiseta amarilla.