Jorge Sampaoli tiene ante sí una nueva oportunidad para reconciliarse con el fútbol. Y es que, pese a sus últimas experiencias deportivas, cumpliendo por debajo de las expectativas en todas ellas, el argentino no se rinde. Es por eso que el ex del Sevilla FC, Flamengo, Olympique de Marsella o selección de Argentina, entre otros, afronta un nuevo reto por delante. Tanto es así que, a falta de oficialidad (la cual apunta a llegar este mismo lunes), asumirá el banquillo del Stade Rennais.
Y es que el pasado jueves Julien Stephan dejó de ser el entrenador del Rennes. Fue el diario L'Équipe quien avanzó ese mismo día que el club francés mantenía conversaciones muy avanzadas con Jorge Sampaoli. Ahora, ha sido el periodista César Luis Merlo quien ha asegurado que ya viaja hacia Francia y que este mismo lunes el técnico argentino ya dirigirá su primera sesión con su nuevo club un año después de ser despedido por Flamengo.
Así pues, será la segunda experiencia francesa del exseleccionador argentino, de 64 años. No en vano, ya entrenó al Olympique de Marsella. Allí no le fueron mal las cosas, pero acabó dejando en la estacada al equipo al considerar que la entidad no había cumplido sus promesas en el área de fichajes. Desde su salida del Flamengo, Jorge Sampaoli ha disfrutado de la vida familiar hasta que ahora, un año y un mes después de ser relevado por el club brasileño, asumirá un nuevo reto.
Lo cierto es que las últimas experiencias de Jorge Sampaoli en los banquillos han estado lejos de ser fructíferas. Su salida del Sevilla FC en la segunda etapa aún está lejos de olvidarse. Especialmente, por los futbolistas a los que dirigió, a quienes su batiburrillo técnico-táctico terminó por hacer un lío en su gran mayoría. Desde los problemas a la hora de transmitir su idea a las quejas de futbolistas como José Ángel Carmona, quien incluso consideró que su trato personal con él fue nefasto, lo cierto es que su marcha del Ramón Sánchez-Pizjuán acabó siendo positiva. No en vano, acabó llegando José Luis Mendilibar y, con un mensaje mucho más simple y certero, llevó a exactamente el mismo equipo que el argentino a salvarse con cierta holgura y, por si fuera poco, a ganar la séptima UEFA Europa League.
Del mismo modo, su temperamento le ha jugado malas pasadas. Después de una experiencia de apenas seis meses, duró más o menos lo mismo en Flamengo, un equipo de máxima exigencia en Brasil al que mantenía quinto en el Brasileirao (la liga de ese país) y quedando eliminado de los cuartos de final de la Copa Libertadores a manos del Olimpia de Paraguay. Asimismo, perdió la final de la Copa de Brasil ante Sao Paulo. Es decir, varios golpes muy duros en tan poco tiempo que acabaron por propiciar su despido. Ahora asumirá una plantilla que mezcla veteranía y talento, con jugadores como Steve Mandanda, Mika Faye, Hateboer, Amine Gouiri o Kalimuendo.