La selección española volvía a Asturias y el gran protagonista del partido fue Andrés Iniesta, el héroe del Mundial de Sudáfrica. El manchego es ovacionado en cada campo por el que pasa la Roja y la afición reconoce su agradecimiento hacia el jugador azulgrana.
Ante Israel, Lopetegui decidió retirar del terreno de juego a Iniesta en la segunda mitad para dar entrada a Isco, momento en el que los más de 20.000 aficionados presentes en El Molinón dedicaron una sonora ovación al capitán del Barcelona.