La selección brasileña es la única que no ha faltado a la cita con los Mundiales en ninguna edición, pero no la que más partidos de fases finales ha disputado. Ese honor le corresponde a Alemania, ausente en 1930 y 1950, que sin embargo suma dos encuentros más que la pentacampeona (106-104).
Alemania ha marcado más goles (224 por 221 de la Canarinha), pero ha ganado menos partidos (66 frente a 70 de Brasil) y tiene cuatro títulos mundiales, uno menos que Brasil, pese a haber disputado 8 finales, por 7 de los brasileños.
Curiosamente, tuvieron que sumar 170 partidos mundialistas entre ambas para que se diese el primer enfrentamiento germano-brasileño en una fase final; fue en la final del Mundial de Corea-Japón 2002.
Ambas son las únicas que han sobrepasado el centenar de encuentros. Italia, tercera en la clasificación histórica, se quedará en 83 encuentros, tras no asegurar su plaza en una fase final por primera vez desde 1958.