El mal sabor de boca que le dejó a De Gea el estreno en el Mundial de Rusia, encajando tres goles en tres disparos a puerta de Portugal y errando en el segundo a disparo lejano de Cristiano Ronaldo, lo corrigió en el segundo encuentro ante Irán dejando su portería a cero aunque su rival no disparó entre los tres palos.
Buscará ante Marruecos en el último partido de España en el Grupo B recuperar confianza con alguna intervención y aparecer de esta manera en la clasificación FIFA de porteros en la que es el único guardameta que ha jugado que no figura.
El mexicano Ochoa ha sido el portero más exigido del torneo, con catorce paradas en sus dos partidos disputados, seguido del danés Kasper Schmeichel con diez y el costarricense Keylor Navas con ocho. El cien por cien de efectividad en sus partidos lo ha logrado el uruguayo Fernando Muslera sin encajar tantos, con seis paradas en 180 minutos, así como el croata Danijel Subasic, que no encajó en sus dos encuentros y salvó cinco disparos a puerta.