En el mapa de precipitaciones de servicio ruso Yandex, que ofrece un preciso pronóstico para las próximas dos horas, se ve que la ciudad de Moscú está literalmente rodeada por varios frentes, al este, oeste y sur.
Pero según el mapa en tiempo que se actualiza cada diez minutos, ninguno de ellos alcanzará en las próximas horas el barrio Jamóvniki en el que se ubica el Luzhnikí.
Con todo, la capital rusa mantiene la alerta amarilla por fuertes lluvias tormentosas para toda la jornada de hoy y augura la posibilidad de vientos con rachas de hasta 20 metros por segundo.
Al mismo tiempo, la ciudad sigue inmersa en un calor inusual para el verano moscovita, con temperaturas de hasta 27 grados centígrados.