El Mundial de Rusia ha sido "todo un éxito", afirmó hoy en rueda de prensa el presidente del comité organizador "Rusia 2018" y viceprimer ministro ruso, Arkadi Dvorkóvich, que calificó con un "sobresaliente" el trabajo de las once ciudades sedes del torneo, que concluirá este domingo en Moscú con la final entre Francia y Croacia.
"El Mundial, por todos los comentarios que hemos recibido, ha sido todo un éxito. En primer lugar, es la opinión de los aficionados, de aquellos que vinieron al Mundial, que viajaron por el país, de los telespectadores que votaron 'sí' encendiendo el televisor. Las cifras de audiencia son enormes", dijo Dvorkóvich.
El viceprimer ministro, cuya conferencia de prensa fue trasmitida en directo en los centros habilitados para los medios informativos en las once sedes del Mundial, señaló que el trabajo de estas "puede calificarse con un sobresaliente" y añadió que las ciudades rusas "cumplieron en cuanto a hospitalidad y seguridad".
Por su parte, el director general de "Rusia 2018", Alexey Sorokin, destacó la "brillante actuación" de la selección rusa, que -dijo- "exhibió un muy buen juego y por primera vez llegó a los cuartos de final de un Mundial", donde cayó ante la finalista Croacia en la tanda de penaltis.
Entre los logros deportivos, agregó que el combinado nacional se situó entre las cinco selecciones más goleadoras del torneo.
"Sorprendió gratamente la asistencia a los estadios, un media del 98 por ciento (del aforo). Mañana nos acercaremos a la cifra de tres millones de entradas vendidas. Prácticamente no hubo butacas vacías", dijo Sorokin.
Según los datos del comité organizador, durante el Mundial llegaron a Rusia más un millón de extranjeros y los aeropuertos de las ciudades sede recibieron a 15 millones de pasajeros.
"Los trenes gratuitos (entre las sedes) fueron utilizados por 300.000 personas, un 70 por ciento de ocupación, que es un buen resultado", señaló el director general de "Rusia 2018".
A las fiestas de aficionados, añadió, acudieron más de siete millones de personas, un cifra superior a la registrada en el pasado Mundial de Brasil.