Las hermanas María y Pilar Caba Hernández, flamantes campeonas del Mundo de la clase 420 en el evento disputado en aguas de Newport (Estados Unidos), han anunciado este jueves a Efe que se retiran de la vela "muy contentas", tras lograr un "objetivo" muy perseguido desde hace años.
Las regatistas del Real Club Náutico de Gran Canaria no continuarán compitiendo en el futuro debido a sus respectivas ocupaciones, ya que María se centrará en sus estudios de Medicina y Pilar, ingeniera industrial, hará lo propio en su trabajo en una empresa automovilística.
"Nuestro objetivo era ganar el Mundial en caso de que hubiese condiciones de 8 nudos en adelante, pero nada más empezar el campeonato se metió una borrasca y alteró el tiempo que suele hacer en Newport. Hubo muy poco viento, lo cual nos perjudicaba, y el comienzo fue muy duro, aunque luego fuimos remontando", ha indicado María.
La patrona del equipo grancanario ha reconocido que llegaron a pensar que ganar el Mundial sería imposible.
"La otra tripulación canaria (integrada por Patricia Reino e Isabel Laseica, que acabó en segundo puesto) es muy ligera, muy rápida y estaba navegando muy bien. Nosotras salimos quintas al agua el último día, pero el viento empezó a subir y logramos remontar hasta ganar el título", ha señalado María.
Por su parte, Pilar ha recordado que en los entrenamientos previos al inicio de competición habían tenido "buenas sensaciones".
"También en la primera regata nos fue bastante bien, pero ya en la segunda finalizamos en la plaza 22. Poco a poco vimos que el campeonato iba a ser complicado, ya que la flota era muy grande, y por eso debíamos ser regulares si queríamos estar en los puestos de delante", ha dicho.
La tripulante grancanaria ha resaltado que en la jornada definitiva se vieron gratamente sorprendidas por el aumento del viento.
"Teníamos que navegar lo mejor posible para poder lograr una de las tres primeras plazas, pero nos sorprendió que subiese un poco el viento, que era lo que se esperaba aquí en Newport, ya que en verano suele haber entre 10 y 15 nudos, y con esas condiciones estuvimos mucho más cómodas", ha comentado.
En esa jornada decisiva, las hermanas Caba Hernández han asegurado que navegaron "tranquilas y sin presión".
"El último día hicimos muy buenos parciales, que fue lo que nos llevó a ganar este título de campeonas del mundo, y encima hemos tenido la suerte de que nos han acompañado nuestros entrenadores y familiares. Al final hemos podido cumplir el objetivo que perseguíamos desde hace años, y estamos muy contentas", han concluido las regatistas canarias.