La jugadora española Aitana Bonmatí, expulsada por doble amarilla en semifinales del Mundial sub-20 contra Francia, considera "injusto e inexplicable" que le priven "de un sueño" como es jugar la final del viernes próximo contra Japón.
"No podré jugar la final del Mundial y me parece injusto e inexplicable que me priven de un sueño. Los que me han visto jugar saben que soy una jugadora sin maldad, que juego limpio y que de hecho acostumbro a recibir más faltas de las que hago", comenta la jugadora en Twitter.
Para Bonmatí, "a ojos de todos queda que la actuación arbitral de ayer no fue equitativa" y añadió: "No estoy segura de que sea la imagen que el fútbol merezca pero no queda otra que aceptarlo con resignación".
"Sin embargo", asegura la jugadora barcelonesa, "no me voy a quedar con esta parte, aunque quería expresarlo, e intentaré quedarme con todo lo bueno, que se resume en mi EQUIPO".