Apenas lleva tres meses en Argentina, pero Iker Muniain está viviendo una auténtica montaña rusa en San Lorenzo de Almagro. Hasta el punto de que sus intenciones de continuar en el club de Boedo en 2025 pueden verse interrumpidas por la crisis institucional que atraviesa el club.
Tal y como informa el Diario Olé, los capitanes de San Lorenzo -entre los que se incluye el propio Muniain- se han plantado ante la dirigencia del club para exigir respuestas y soluciones después de cuatro meses de impagos en su salario y varias primas correspondientes a la clasificación a la Copa Libertadores.
Una situación económica límite y que ha provocado que varios de los futbolistas más jóvenes no puedan pagar el alquiler de sus casas y que integrantes de la primera plantilla les hayan tenido que ayudar económicamente.
Todo ello les ha llevado a trasladar un ultimátum al presidente Marcelo Moretti: si en los próximos días no se llega a un acuerdo para saldar estas deudas, rescindirán sus contratos con el aval de Futbolistas Agremiados, el sindicato de jugadores de Argentina.
El primer jugador de San Lorenzo que ya ha dado el paso de rescindir su contrato es Francisco Fydriszewski, el jugador que tuvo un encontronazo con Iker Muniain cuando iban a lanzar un penalti. El delantero, con pasado en el CD Lugo, ni siquiera se está presentando a los entrenamientos.
En el caso del excapitán del Athletic, aunque en unas declaraciones recientes mostró su intención de continuar en el club de Boedo y negó tener una cláusula liberatoria para abandonar la entidad si River Plate estaba interesado en su fichaje, si acaba rescindiendo su contrato tendrá que buscar otro destino -previsiblemente en Latinoamérica- o continuar siendo capitán general en San Lorenzo.