El italiano Claudio Ranieri, actual técnico del Sampdoria y artífice del histórico título del Leicester en la Premier League de 2016, expresó su orgullo por la hazaña lograda en Inglaterra y contó las técnicas psicológicas usadas para mantener a sus jugadores al máximo físicamente y psicológicamente.
Ranieri, que entrena al Sampdoria desde octubre de 2019, vive en Italia el aislamiento a causa de la emergencia por el coronavirus y repasó en una entrevista difundida a última hora del lunes por la televisión Sky Sport su histórica Premier League al frente del Leicester.
"Desdramatizar" es la palabra usada por Ranieri para resumir el trabajo psicológico que realizó con sus jugadores para evitar que les pudiera la presión al verse, jornada tras jornada, líderes ligueros por delante de los colosos de Inglaterra. "Era importante que los chicos no sintieran demasiadas responsabilidades. Tenía miedo de que les pudiera la presión, por ser un equipo que salió con el objetivo de salvarse y que en ese momento luchaba con los más grandes", afirmó Ranieri.
"Entonces quise poner pequeños objetivos, poco a poco. Primero evitar el descenso, luego luchar por Europa y luego luchar por el título. Hice de esta forma hasta el final, siempre quise desdramatizar", agregó.
El antiguo entrenador del Valencia CF también repasó una de las decisiones que más sorprendieron en el camino hacia la Premier, cuando, tras una derrota contra el Arsenal en la jornada 25, concedió una semana entera de descanso a sus jugadores.
"Era un período en el que teníamos tres partidos contra 'grandes' consecutivos, Liverpool, Manchester City y Arsenal, y, para bromear, los jugadores me pidieron unos días de vacaciones dependiendo de los puntos que sumaríamos. Al final (el inglés, Jamie) Vardy me dijo que, de sumar nueve puntos, merecían una semana de descanso", aseguró Ranieri.
"Ganamos 2-0 al Liverpool, 3-1 al City y perdimos 2-1 con el Arsenal, jugando la segunda mitad con diez y recibiendo el gol decisivo en el 95. Al final les dije que el resultado es fruto de mil factores, pero que las prestaciones no lo son. Les dije 'váyanse a casa, para mí es como si hubieran ganado'. Y les di una semana de vacaciones", prosiguió.
Unas decisiones que terminaron siendo premiadas, con el Leicester que, tras salvarse en la última jornada del campeonato anterior, se coronó campeón de Inglaterra. "Me alegro mucho por la gente que vino. Me acuerdo de que llegaban cartas desde todo el mundo. Había italianos que viajaban a Leicester, incluso sin poder ir al estadio. Venían para participar en la fiesta en la ciudad", contó Ranieri.