El Liverpool busca volver a la competición para culminar un año casi perfecto. Una temporada sólamente empañada por la eliminación ante el Atlético en Champions League. Una noche que no olvida Adrián San Miguel, que espera que el fútbol vuelva cuanto antes para quitarse "ese resquemor".
El portero del Liverpool analiza, en su entrevista para ElDesmarque, su temporada a las órdenes de Jürgen Klopp.
- ¿Cómo llevas el no poder salir de casa?
Esto nos va a hacer más humanos y humildes. Es un virus que apenas se puede ver y paraliza todo el mundo. Parecía que lo teníamos todo bajo control y llega algo que nos hace tener que dar un paso atrás respetando la salud.
- De entrenar en el campo del Pilas a firmar por el Liverpool y en apenas una semana ser héroe en la Supercopa de Europa. Ahora luchas por un puesto con Alisson y llega una pandemia mundial. Vaya temporada...
Personalmente quién me lo iba a decir el verano pasado, cuando en Julio estaba entrenando en Pilas, sin contrato en vigor y decidí al final tomar otro camino. Llega el Liverpool en agosto y todo sucede como sabemos. Apenas tres entrenamientos y tuve que debutar en el primer partido porque Alisson se lesionó. Después fue la Supercopa de Europa que fue mi primer título y siendo gran partícipe parando ese último penalti con el Chelsea. El club está viviendo sus mejores momentos, estamos a un paso de ganar la Premier League. Faltando nueve jornadas le sacamos 25 puntos al City que es una barbaridad. Al final podamos culminarlo al final en el campo y llevarnos la Premier League.
- ¿Cómo es para Adrián convivir con Mané, Firmino, Salah y compañía?
Desde el principio Klopp me demostró su confianza y me dijo que obviamente no me habían firmado por ese último año en el West Ham porque apenas jugué cinco partidos. Me venían siguiendo desde hace tiempo pero nunca se dio esa oportunidad y ahora fue el momento. Ellos dieron el paso adelante y yo no tenía nada que pensar. Tenían opciones encima de la mesa avanzadas pero cuando te llama el Liverpool poco hay que pensar. Sabia que iba a tener competencia fuerte con Alisson pero al final eso nos hace mejores a todos. Hemos tenido una gran relación, una competición sana entre nosotros y todo se ve en el campo. En cada entrenamiento, cada acción tiene esa intensidad y filosofía que ha inculcado y toda la gente ha podido disfrutar del Liverpool desde principio hasta fin esta temporada.
- ¿Cómo es el día a día con Jürgen Klopp?
El míster es una persona con mucho carisma, tiene su carácter fuerte obviamente pero después lo vive y lo disfruta como uno más. No se siente superior a nadie, él maneja el timón de este barco y desde el principio nos hizo saber que el grupo está por encima de cada individualidad. A pesar de tener grandes nombres, si ves cómo trabaja el equipo durante 90 minutos .. Es de elogiar el trabajo que está haciendo desde que llegó.
- Supuso un palo la eliminación de Champions ante el Atlético...
Aunque pierdas, empates o ganes un partido, a la semana que viene tienes otro. Por circunstancias ese fue el último. Nos dolió porque salir eliminado de Champions de esa manera cuando hicimos 27 tiros a puerta y dos o tres palos... En un partido normal habríamos llevado la eliminatoria hacia adelante. Aceptar que el Atlético hizo su partido y fue justo vencedor en los dos partidos. Afrontarlo con la mejor ilusión posible de poder seguir. Te quedas con ese resquemor de estar deseando que sea el próximo para volver a nuestro nivel.
- Viendo tu nivel, ¿te queda la espina de no haber tenido más protagonismo en la selección?
Cuando recibí esa llamada, cuando estaba en el West Ham, tenía bastante continuidad y lo estaba haciendo bien. Al final tuvo esa repercusión en España. Está claro que cuando juegas fuera se hace más difícil. Estando ahora en el Liverpool, con repercusión de nivel mundial, yo lo catalogaría muy exitoso. No hemos terminado la Premier pero ya estamos a un paso, ganamos Sueprcopa de Europa en agosto, el Mundialito en diciembre y el club está consiguiendo los objetivos. Individualmente estoy contento.