En estos momentos el Manchester City está ultimando los detalles del nuevo contrato que firmará Pep Guardiola para seguir en Inglaterra más allá de la presente temporada. Después de unos largos meses dando largas y soltando mensajes enigmáticos, todo apunta a que finalmente ambas partes han alcanzado un principio de acuerdo para firmar la tan ansiada renovación.
Y lo hacen todo con el temor de que todas las dudas puedan ponerse en contra del club en el caso de que se confirme si se termina dando un descenso administrativo por 115 infracciones. Un juicio al que se enfrentan pero que parece que no va ligado a que Guardiola esté pensando en sacar tajada de ello si termina ampliando su contrato.
Aunque el City niega todas las acusaciones, es inevitable pensar en qué pasaría si terminan siendo culpables del caso y se confirma su descenso de la categoría. En este escenario, el técnico catalán no tiene pensado incluir ninguna cláusula para acortar lo que sería su nuevo contrato firmado hasta el 30 de junio de 2026 con opción a otra más, tal y como asegura el diario británico The Guardian.
Es decir, si el equipo inglés desciende, Guardiola estaría dispuesto a dirigir el equipo en tercera división durante todo un año, gesto de la gran relación que tiene ambas partes: "Hay más posibilidades de que me quede si estamos en League One que si ganamos la Champions League", explicó Pep hace un año al saber que el City estaba siendo investigado.
En los últimos meses, Guardiola ha estado cerca de poder se seleccionador. Dejó pasar la opción de dirigir a Inglaterra e hizo oídos sordos a Brasil con el reto de estar en un banquillo durante la Copa del Mundo 2026. Ahora todo ha cambiado y parece que está dispuesto a seguir un año más en el Etihad, consecuencia quizás de que no haya un país potente que le motive a salir de Inglaterra.
Actualmente afronta una etapa complicada de la temporada. A cinco puntos del Liverpool, fuera de clasificación directa a octavos en Champions y eliminado de la Carabao Cup (Copa de la Liga) desde finales de octubre. El reto le motiva a Pep que, mientras piensa en cómo volver a ser dominante, renovará su contrato sin letra pequeña.