El Rayo Vallecano, sin nada en juego tras consumar su descenso a Segunda hace dos jornadas, buscará en Vigo un triunfo que, según confiesan desde el vestuario y la entidad, les permita "terminar la temporada de la mejor forma posible y caer de la manera más digna".
"Debemos motivarnos, aunque no es fácil, pero no es lo mismo terminar la Liga último que penúltimo", dijo hace unos días Paco Jémez, que, según ha reconocido, ya tiene la mente puesta en una "ilusionante" próxima temporada.
A ese discurso se ha sumado el presidente, Raúl Martín Presa, que ha declarado que es "importantísimo no terminar el curso último", pero sobre todo el capitán Alberto García, una de las voces más autorizadas del vestuario y que tiene contrato hasta 2021.
"El vestuario es consciente de que tiene que acabar la Liga de la mejor manera, mostrando respeto a la institución a la que pertenecemos y a una masa social que siente todos los partidos con la misma intensidad", ha dicho Alberto García esta semana públicamente.
"Hay que asumir las responsabilidades y ser conscientes de a quién representamos para acabar de la mejor manera posible. La despedida tiene que ser mirándonos a la cara. Hay que caer de la manera más digna posible y asumir la situación. Lo peor sería mirar para otro lado porque la afición siempre ha estado a nuestro lado y nos ha mostrado un respeto formidable", subrayó.
Lo único que tiene en juego el Rayo la última jornada son tres puntos que le podrían permitir no acabar la temporada como último. En la clasificación tienen 31 y el Huesca, que juega con el Leganés, 30.
Para ese partido frente al Celta, Paco Jémez cuenta con tres bajas importantes en defensa. Dos por lesión, las del central Alejandro Gálvez y el lateral derecho Tito, y la del lateral izquierdo Alex Moreno por sanción.
Pensando ya en la temporada que viene, Paco Jémez podría dar minutos a algún futbolista del filial. Miguel Morro, Pipe Sáez, Martín, Carrasco y Sergio Moreno están entrenando esta semana con el primer equipo.