Las cinco claves de la renovada estabilidad del Espanyol
El Espanyol ha presentado en las últimas jornadas un crecimiento progresivo que ha dejado atrás su crisis de resultados del último tramo del año 2018, una mejoría futbolística que permite mirar con más tranquilidad al calendario y aleja al equipo catalán de la zona baja de la clasificación.
1. Las seis derrotas seguidas, olvidadas
El equipo cerró el 2018 con seis derrotas: Sevilla, Girona, Getafe, Barcelona, Betis y Atlético. Rompió su dinámica contra el Leganés, volvió a caer tres veces seguidas (Real Sociedad, Eibar y Real Madrid), empató contra el Villarreal, ganó al Rayo y, ayer, firmó un cero a cero en Mestalla. Los resultados son ascendentes.
2. Rendimiento a domicilio
Los resultados del Espanyol fuera de casa han sido un lastre desde que arrancó la temporada. Los de Rubi llegaban a Mestalla como el peor visitante de la categoría, con siete puntos, y este domingo sumaron ocho. En sus dos últimos desplazamientos (Villarreal y Valencia) han exhibido más solidez y no han vuelto de vacío.
3. Fortaleza defensiva
El partido contra el Valencia sirvió para demostrar que la solidez atrás del Espanyol está de vuelta. El cero a cero en Mestalla supone el primer encuentro sin encajar dianas nueve compromisos después, entre LaLiga y la Copa del Rey. Era una de las prioridades de la plantilla.
4. Regreso de futbolistas clave
El Espanyol no ha tenido fortuna con las lesiones. Primero empezaron los problemas en defensa, con las lesiones de David López y Mario Hermoso, que contra el Valencia ya volvieron a actuar juntos, Naldo y Óscar Duarte. Ahora, los atacantes Piatti y Sergio García son baja. A trompicones, Rubi recompone su once.
5. Fe en el proyecto
Remar hacia arriba no hubiera sido posible sin la confianza de todos los estamentos del Espanyol en el proyecto. La directiva, los futbolistas y el entrenador han aparcado las dudas y han creído siempre en su capacidad. El vestuario afirma públicamente que al final de curso estará peleando por los puestos de arriba.