El RCD Espanyol se ha enfrentando al fantasma del descenso en distintas etapas de su historia reciente, que finalmente salvó sobre la bocina, una situación que recuerda a la que actualmente vive el equipo, colista de Primera División y a seis puntos de los puestos de permanencia.
El episodio más reciente lo encontramos en la temporada 2008-09, de la mano del entrenador Mauricio Pochettino. El argentino, a falta de once jornadas, la misma situación que actualmente, y a ocho puntos de la salvación, lideró a su equipo hacia la permanencia, un precedente al se aferran hoy muchos aficionados del Espanyol.
A la gesta de 2008 le sigue la vivida el 13 de mayo de 2006, justo hace 14 años. El delantero Ferran Corominas marcó en el descuento contra la Real Sociedad, en Montjuïc, y salvó al bloque catalán de un descenso que parecía cantado. La diana del atacante está grabada en la retina de todos los aficionados periquitos.
En la temporada 2003-04, los entonces pupilos de Luis Fernández lograron aferrarse en Primera división también en la última jornada. El delantero Raúl Tamudo, hoy parte de la dirección deportiva, y el central Alberto Lopo marcaron contra el Murcia en un partido de infarto que valió para seguir en la máxima categoría.
Los futbolistas de la actual plantilla blanquiazul están convencidos de que la remontada es posible. Todos los componentes del grupo han aparcado cualquier situación individual y anteponen el colectivo a sus intereses, como renovaciones o protagonismo en el equipo.
Además, el vestuario del Espanyol cuenta con Abelardo Fernández como entrenador, un técnico que en su trayectoria reciente también ha salvado proyectos 'in extremis'. El preparador asturiano logró subir de Segunda a Primera al Real Sporting de Gijón la temporada 2014-15, antes de lograr la permanencia la siguiente campaña -dos cursos en los que el club de la capital de la Costa verde estaba sancionado, sin poder fichar-; y también salvó al Alavés hace dos campañas.