Fue una de las imágenes de la pasada jornada de LaLiga EA Sports. Antes del partido entre el Girona y el Espanyol, un miembro de seguridad prohibió el acceso a un niño de cinco años a Montilivi por mostrar la camiseta del equipo de Barcelona. El motivo: era un partido de alto riesgo.
Una situación que vivió Gorka junto a su abuelo, pero que explicó su padre, Aitor Pajares, en 'ElDesmarque Madrugada'. "Van a pasar la tarde y les dicen que no pueden entrar con la camiseta del Espanyol. Al preguntarle que hacemos con la camiseta, le dicen que la deje en el bosque y luego la recoja", explicaba. "Menos mal que encontraron una señora del Espanyol que iba a la grada visitante, que ahí si le dejaban entrar con la camiseta. La señora le dijo que se la dejara, que al final del partido les llamaba y se la devolvía", aseguró.
Tras lo ocurrido, el Espanyol reaccionó, invitando a Gorka a un entrenamiento en el estadio para conocer a sus ídolos. El pequeño de cinco años disfrutó con los jugadores, lanzó penaltis e incluso recibió una camiseta de mano de Javi Puado con el '21' en la espalda.
Además, también fue invitado al partido ante el Celta. "Vamos a ganar 7-0", decía Gorka ante las cámaras de 'ElDesmarque'. No fue así, pero su equipo sí venció al equipo de Vigo con un 3-1 que permite al equipo respirar con algo más de tranquilidad después de varias derrotas.
"Nunca le he visto esta cara", decía su padre sobre la felicidad de Gorka, que por fin recuperó la sonrisa después de varios días complicados. "No se ha quitado la camiseta ni para dormir", aseguraba su padre, mientras que el abuelo desvelaba que Puado le había pedido que ''llevara la camiseta con honor'.