Javier Aguirre es una de las personalidades más reconocidas de nuestro fútbol. No es porque vaya a jugar una final de Copa del Rey con el Mallorca en dos días. El ‘vasco’ lleva labrándose un mito entre los entrenadores del fútbol español desde que llegara en 2002 a Pamplona para entrenar a Osasuna.
Más de veinte años después ha pasado por Atlético de Madrid, Real Zaragoza, Espanyol, Leganés… Todos conocemos su talante, pero pocos, muy pocos, saben que parte de esa genialidad la aporta Silvia, su mujer.
El Twitch de ElDesmarque ha podido hablar con Iñaki Aguirre, hijo del técnico mexicano, quien nos ha confesado algunas de las intimidades de su hogar. Silvia, con quien lleva casado más de 40 años casados, es “su pilar”. En el vídeo que encabeza la noticia, la entrevista con Iñaki Aguirre antes de la final de Copa del Rey.
Preguntamos al hijo del técnico si el vasco tiene algún tipo de ritual antes de un partido de estas dimensiones. Iñaki nos confesó que nada de nada. “En casa con mi madre, su famoso whiskito por las noches… A parte de eso, es una persona serena, siempre mantiene su rutina. Si acaso es mi madre la que lleva la marcha de la casa. Si fuese por mi padre estaría siempre en casa leyendo. Mi madre es la que lo saca a cenar y le lleva al cine y luego lo acaba agradeciendo. Viviendo la vida normal antes del partido”, explicó.
En casa de Aguirre se respira serenidad, según Iñaki porque Javier llega cansado de tanto enfado en el fútbol. Y es que, en casa, a quien más le gusta el futbol, es a Silvia. “A mi padre si le preguntas cuál es su deporte favorito dice el béisbol. Él jugaba al béisbol, pero se le dio bien el fútbol. Mi madre es la que en casa se pone un Elche – Ponferradina o lo que sea”, confiesa Iñaki, quien también explica que esto tiene sus contras. “Es un arma de doble filo, porque a parte de las claves y ayudas también le suelta alguna pullita. En plan, ¿por qué hiciste este cambio? O, ¿si este jugó todo el partido la jornada pasada por qué es suplente? Es la que manda, desde luego”.
Independientemente del fútbol que se debata en casa, el hijo se sincera. “Con mi madre son muchos años casados, es su pilar”.