Asimismo, Mel ha vuelto a insistir en la necesidad de un delantero para el plantel verdiblanco. "Me da igual que me llamen llorón, yo tengo que dar el coñazo previendo lo que puede pasar. Ante el Valladolid el otro día sólo teníamos dos delanteros, si hubiera querido cambiar uno para refrescar el ataque no habría podido. Yo tengo que mirar por el equipo y prever lo que puede pasar en el futuro". Además, ha recordado que la ficha de Odonkor sigue libre y que ese refuerzo podría acometerse ya.
Precisamente sobre el futuro ha querido desterrar la imagen de que sus equipos se vienen abajo en la segunda vuelta y no acaban de cumplir su objetivo. "Eso no es realmente así. De todas formas en el Betis en esa segunda vuelta tendremos a jugadores recuperados como Pereira o Arzu con los que no podemos contar por ahora".
Por último, ha dejado claro que para él el nombre del estadio bético es "el Villamarín, no otro", que trabajará con el consejo que se resulte tras la junta o tras la intervención judicial, "sea Oliver o sea otro", que es bético "por encima de todo", y quiere el bien para el club, y que ha mantenido reuniones "con Gordillo, y ojalá se cumpla lo que hablamos aquel día en una reunión".