Anecdotario de la junta: la "chulería" de Estepa, la luz y poemas en la madrugada

La junta de accionistas del Real Betis dio para más de siete horas de duración y para muchas cuestiones que quedaron en un segundo plano o que no fueron trascendentes, pero que merecen ser tenidas en cuenta ya sean por su carácter curioso o anecdótico o porque realmente hubo peticiones, quejas o exposiciones muy valoradas, aunque no con tanto peso en la actualidad verdiblanca.

Sin expresidentes
Ni Miguel Guillén ni Manuel Domínguez Platas, los dos últimos presidentes del Real Betis, estuvieron presentes en el hotel Al Alandalus en la junta general de accionistas. Guillén salió de forma más aseada, pero en cuanto a Domínguez Platas, las críticas han arreciado. Ambos formaron parte, antes o después, del ejercicio que se analizaba en la junta de este martes.
La defensa de Diego García León
Hace un año Diego García León entraba precisamente en el consejo del Real Betis tras la junta de accionistas. Luego, las especulaciones sobre su relación con una empresa de representación de futbolistas y sus posibles intereses ocultos lastraron su imagen y su figura. Este martes quiso defenderse públicamente. Pidió solo una vez la intervención y lo hizo para defenderse de esos ataques. Se quejó ante la prensa y recibió aplausos de casi la totalidad del consejo actual.
La 'chulería' de Estepa
Fue muy breve, pero un accionista del Real Betis subió al estrado en una sola ocasión y con un único mensaje, claro y directo: "Está usted aquí por nosotros y puede salir usted por nosotros, ha pecado de chulería". Recibió una de las grandes ovaciones de la noche.
Las caras amables
No todo iban a ser críticas al consejo. Otro accionista con minusvalía agradeció al club que haya ido eliminando barreras arquitectónicas poco a poco en el estadio y que haya facilitado su acceso. Otra petición de otro accionista fue homenajear a las Peñas Béticas de Catalunya por su constante apoyo al Betis.
Las votaciones eternas
De las siete horas que duró la junta de accionistas del Betis, dos transcurrieron en votaciones. En el punto uno, cuando se desdobló una votación en dos, las votaciones consumieron una hora de reloj. Errores, acumulación, las dos votaciones... Luego también se hicieron eternas las votaciones de aprobación a los nuevos consejeros. Fueron votados uno por uno y ya altas horas de la noche. "Insufrible", se escuchaba en el patio de sillas.  
La mano tendida de Adolfo Cuéllar
La Fundación Heliópolis estuvo en la diana de la junta en varias ocasiones, con más o menos fundamento. Pero pocas intervenciones de esta hubo, comparado con otros años en los que se mostraron mucho más críticos. Sí salió Adolfo Cuéllar, que tendió la mano a Manolo Castaño: "El anterior consejo de administración tenía que cesar en su cargo tras el descenso a Segunda, dijeron que se haría de forma paulatina y me alegra que lo haya cumplido. Este nuevo consejo no es responsable de que el Betis esté en Segunda. Hay consejeros que no conozco de nada. Les deseo la mejor suerte del mundo. A mí no se me preguntan nunca, aunque algunos piensen lo contrario. Tenemos que acabar con las luchas fratricidas. Tenemos que conseguir subir, que se calme el ambiente. No tengo inconveniente alguno en que el señor Castaño tenga sus acciones representadas en el consejo y creo deberían valorarlo y tender la mano. Debemos unirnos".
La luz
Era ya el tramo final de la noche, más cerca de las dos de la madrugada que de la una y media, y entonces se fue la luz mientras. "Yo lo único que quiero es que se escuche...", decía un accionista en el justo momento en el que se fue la luz, la megafonía y la junta quedó a oscuras y sin escuchar, precisamente, lo que ese accionista pretendía hacer llegar".
"Manolo, dales caña"
En una de las intervenciones del exconsejero y actual accionista Manolo Castaño, el conocido aficionado verdiblanco Pepsi, presente en la junta, no tuvo problemas ni tampoco graduación para animarlo a que diera "caña" al actual consejo. El mismo seguidor provocó que un par de veces la mesa llamara su atención por su tono. 
Poesía de madrugada
Fue un accionista vitalista y atrevido el que ya a altas horas de la noche, metida ya la junta en la madrugada, se atrevió en su intervención a exponer sus argumentos, respetables y válidos como los que más, de forma muy retórica y reflexiva. Algunos accionistas escuchaban un tanto incrédulos las comparaciones, en muchos casos bélicas y de la Segunda Guerra Mundial, las citas de autores y hasta reflexiones casi filosóficas. El mismo interviniente cerró su alocución recitando, rima incluida, una cita. Bonita por cierto.