El triunfo del Betis ante el Girona tuvo varias protagonistas pero hubo uno que se marchó de Montilivi con mucha felicidad. Tonny Sanabria volvió a sentirse futbolista muchos meses después, en un rato sobre el terreno de juego de mucho nivel aunque no viera portería.
El delantero del Betis se lesionó después del partido ante el Girona de la primera vuelta y reapareció para dar tranquilidad en ataque, ayudar a sus compañeros y dar trabajo a los centrales del rival. Sanabria se quedó sin ocasiones de gol pero su participación fue fundamental para que el Betis saliera de la presión gerundense en la segunda parte.
El paraguayo se fue como máximo goleador del Betis y ahora será uno más en la recta final de la temporada. La competencia con Sergio León, Loren y Rubén Castro ayuda a mejorar el rendimiento de un jugador que está con hambre.