El Real Betis vive uno de los momentos más dulces que se recuerdan en los últimos años. El triunfo del pasado viernes frente al Girona otorgó al equipo un impulso importantísimo para acercarse a las aspiraciones que se marcó la entidad a principios de curso, con un ansiado retorno a Europa tras un lustro sin hacerlo que queda más cerca que nunca.
Motivos más que suficientes para que el Betis haya vuelto a pisar el Real de la Feria, tras dos años sin hacerlo. Una comida de confraternización que ha contado con numerosos detalles. Uno de los protagonistas de la tarde ha sido Aissa Mandi, que ha pisado el albero de Los Remedios con un sorprendente look, con un sombrero y unos tirantes que no han dejado indiferente a nadie.
Otro de los que más ha sido demandado es Ángel Haro. El presidente de la entidad no ha parado de recibir abrazos, felicitaciones y jaleos de los aficionados por allí presentes, dándose incluso un baño de masas hasta con los guardias de seguridad de la caseta de la Peña Bética Rafael Gordillo, que no han desaprovechado la ocasión para inmortalizar el momento con efusivos abrazos.