Ahí está el Betis. Ahí está el Betis de Quique Setién. El Betis que por primera vez en su historia ganó en San Siro. Triunfo de mucho peso, enorme partido. Vital para soñar con el pase, genial para crecer en ambición. El Betis de Setién dio un golpe en la mesa ante el Milan al ritmo de Lo Celso. El sufrimiento final bien valió la pena, pero con Lo Celso todo es más fácil. ExCelso Betis.
El argentino dijo aquí estoy ya para llevar un alegrón tremendo a los 7.000 que estaban en San Siro. A todos los béticos del mundo. Un partido casi perfecto., porque el sufrimiento final fue innecesario. El Betis de Setién había dado un repaso al Milan de Gattuso, pero sesteó y sufrió. Así el alegrón fue mayor.
El Betis tuvo que sentenciar el partido en la primera parte, pero por un motivo u otro se fue con una alegría intranquila en el cuerpo. Fue mejor que el Milan, en defensa y en ataque, faltó que Sanabria estuviera más inspirado y el árbitro no cometiera un grave error. ¡Y algunos se quejan del VAR! El asistente vio fuera de juego en una acción entre Junior y Sergio León que acabó en gol de Sanabria. Incomprensible.
Ese error tuvo que significar el 0-2 y dejar herido casi de muerte al Milan. Porque lo estuvo con el 0-1, obra de Sanabria tras una gran jugada de Lo Celso, el mejor bético. Buena ayuda hubo también de Reina y Romagnoli en esa jugada, la única en la que el paraguayo marcó casi sin querer, porque no tuvo tiempo para pensar. Luego tuvo dos más que se fueron al limbo. Era la sentencia antes del descanso.
El asistente vio fuera de juego en una acción entre Junior y Sergio León que acabó en gol de Sanabria. Era el 0-2
Y si Setién mira los números, su Betis iba ganando en San Siro tras 45 minutos con una posesión inferior al rival: 55%-45%. Y esta vez sí tuvo varias ocasiones claras de gol, con dos delanteros y jugando muchas veces a los espacios. En una de esas apareció Lo Celso con Reina a la desesperada, pero el disparo del argentino tropezó entre las manos y el pecho del portero español. El árbitro se hizo el sueco, aunque sea holandés.
Con el Betis tranquilo, el Milan no sabía cómo meter mano. Y nervioso, pero con Higuaín sobre el césped en cualquier momento puede haber un lío. Un error de Bartra dejó al ex del Real Madrid delante de Pau López. Regateó y de repente apareció Mandi para evitar el empate. Espectacular el argelino.
Lo Celso se atrevió a ser vertical y se inventó un golazo de esos que dan la vuelta al mundo. Un zapatazo a la escuadra de Reina. G-O-L-A-Z-O.
Para espectacular, Lo Celso. Vaya jugadorazo tiene el Betis. El argentino dio un paso atrás en el campo tras el descanso para convertirse en el líder del Betis. En defensa y en ataque. El ex del PSG se atrevió a ser vertical y se inventó un golazo de esos que dan la vuelta al mundo. Un zapatazo a la escuadra de Reina. G-O-L-A-Z-O.
El 0-2 fue una vitamina especial para el Betis, que empezó a controlar el partido a su antojo. El Milan era incapaz de crear peligro, con Lo Celso por todos los lados. Pero es el Milan, infinitamente peor que el gran Milan, y es San Siro, lleno de béticos. Castillejo avisó con un disparo al poste cuando el Betis ya empezó a sestear demasiado.
Y de tanto sestear el Milan se metió en el partido. Sidnei no apretó, Junior dejó mucho hueco a Castillejo y Mandi llegó tarde ante Cutrone. Había partido, le tocaba sufrir al Betis. Más que nada por el resultado, corto para lo que se había visto. Los corazones béticos se aceleraron en una acción entre Bartra y Castillejo que bien pudo ser penalti. El árbitro no pitó.
El partido no llegaba a su fin, el alargue era infinito. Pero llegó, con Castillejo expulsado por su locura ante Lo Celso. Un futbolista tremendo, bestial. Algunos restarán mérito al triunfo del Betis, pero ganar en San Siro, esté como esté el Milan, no está al alcance de muchos. El EuroBetis va a dar guerra.