La noche mágica del Domingo de Reyes de 2018 siempre quedará en el recuerdo de los aficionados béticos. Pero también en el de Quique Setién. El entrenador del Betis fue uno de los grandes responsables de aquel derbi del 3-5 que dio la vuelta al mundo. Una noche especial pero extraña, porque no estuvo en el banquillo.
Setién, que cumplía un primer partido de sanción tras ser expulsado en la jornada anterior, vio el partido lejos de donde es habitual, junto a su segundo, también sancionado. Y, curiosamente, su ayudante se perderá el derbi del sábado por sanción, una vez más.
El entrenador del Betis se perdió por sanción el derbi en el Sánchez-Pizjuán de la pasada temporada y este sábado sí estará en el banquillo
El técnico cántabro celebró el triunfo a lo grande pero con la espinita de no haberlo vivido sobre el césped. Aquella noche fue Marcos Álvarez el elegido aunque siempre estuvo en contacto con Setién para los movimientos respecto a los cambios o indicaciones especiales a los jugadores.
El entrenador del Betis firmó en el Sánchez-Pizjuán su segundo gran día desde que llegó a Heliópolis después de ganar en el Santiago Bernabéu. Y fue el impulso para que el Betis se metiera en la pelea por Europa... y lograra la clasificación. Y esta vez puede servir para firmar el mismo objetivo al final de la temporada y aumentar su caché entre los béticos.