El destino final de Rabiot

El sueño del Real Betis fue sólo un sueño. Porque Adrien Rabiot jugará esta temporada en la Juventus, con la que tiene previsto pasar las pruebas médicas este lunes. Un contrato espectacular, de muchos millones de euros, una opción que se queda en eso porque era un imposible.

Pero el nombre de Rabiot estuvo presente en la agenda de José Miguel López Catalán. Y hasta hubo acercamiento y oferta a través de un intermediario. El Betis ofreció al francés un contrato de dos temporadas, con 20 millones de euros por prima de fichaje, tres millones netos por temporada y un 50 por ciento en la plusvalía de una futura venta. Eran unas cuentas complicadas que al final se quedan en simples cuentas.

Porque en el Betis se dieron cuenta desde pronto que Rabiot era imposible. El ex del PSG, libre y sin jugar desde enero por no renovar y discrepancias con el club parisino, pedía mucho para lo que el Betis puede dar. Su calidad nadie la discute, pero su caché no está a la alcance un club como el Betis. Por eso se va a la Juventus, poderoso en lo deportivo y en lo económico.

Así lo ha confirmado este domingo el periodista de Sky Sports Gianluca Di Marzio. A pesar del interés de varios clubes europeos, Rabiot ha dicho sí a la oferta bianconera, inferior en la prima de fichaje a lo que el Betis tenía pensado (unos 10 millones de euros), pero muy superior en la ficha anual (cuatro temporadas y siete millones netos por cada una).

Además, la operación del Betis con Rabiot entraba también el dinero que podría dejar en la caja Giovani Lo Celso. De momento, el argentino sigue en el Betis, aunque con pinta de que saldrá. Y el que no llegará a Heliópolis, al menos ahora con este caché, es Rabiot.