Mientras que López Catalán y la secretaría técnica del Betis terminan de cerrar la plantilla, este 21 de agosto se cumplen dos efemérides que ahora suenan lejanas.
Tal día como hoy del año 2003, Martín Palermo firmaba por el Real Betis Balompié. El delantero histórico de Boca Juniors llegaba procedente del Villarreal CF y Víctor Fernández le esperaba en el banquillo. En el equipo amarillo estuvo dos años y medio y no rindió a buen nivel. A su llegada a la capital hispalense, Palermo se mostraba muy contento por su fichaje. "La característica de este equipo es llegar y centrar por banda y eso es un beneficio para mí. Ojalá que todo ese esfuerzo se pueda corresponder dentro del campo. Tengo mucha ilusión, porque para mí supone todo un desafío cambiar esa imagen. El presidente y el entrenador me han dado la posibilidad y voy a luchar para dar lo máximo a este club. La decisión de venir a un grande es un desafío", aseveraba.
El club verdiblanco quiere recuperar la imagen que en años tenía. Así lo reflejan las declaraciones de Palermo. "El Betis es un grande y peleará por cosas importante, por entrar en la Copa de Europa. Poner una cifra al comienzo es no saber. Trataré de marcar la mayor cantidad, porque ésa es mi función". Palermo vistió de verdiblanco la temporada 03/04. Jugó 12 partidos, solo ocho como titular, y marcó un gol.
Dos años antes del fichaje del argentino, un gran jugador se marchaba del Betis también un 21 de agosto. Ángel Cuéllar ha sido uno de los grandes delanteros de la historia verdiblanca. Tal día como hoy, el consejo de administración heliopolitano con Lopera a la cabeza, informaba al jugador que era despedido por dos faltas muy graves.
"Por medio de la presente nota de prensa y con fecha 21 de Agosto de 2001, el Consejo de Administración del REAL BETIS BALOMPIE, S. A. D. , ha decidido resolver el expediente sancionador incoado al jugador de fútbol profesional D. ANGEL MANUEL CUELLAR LLANOS por 2 faltas muy graves, con el Despido Disciplinario.En la tarde de ayer le fue comunicado dicho despido disciplinario al jugador en su domicilio particular", rezaba el comunicado.
Ángel Cuéllar decía lo siguiente a Europa Press en aquel momento. "No voy a hacer ninguna declaración por ahora, ya en su momento, si acaso, hablaré".
A principios de agosto de 2001, el Betis suspendió 15 días al exjugador por bajo rendimiento (52 partidos, y no completos, en los últimos cuatro temporadas). El 3 de agosto de 2001, Cuéllar dio una rueda de prensa en las instalaciones de la ciudad deportiva sin permiso del Betis.