El primer movimiento sonado del mercado de invierno de LaLiga Santander ha tenido como protagonistas al Real Betis Balompié y el FC Barcelona. El club culé ha cedido a Carles Aleñá al verdiblanco y mientras uno de los entrenadores está encantado, el otro no tanto.
A Ernesto Valverde no parece haberle sentado nada bien la salida del canterano, con el que estaba contando de manera asidua en los últimos partidos después de varios meses en el ostracismo.
Este viernes, en la rueda de prensa previa al partido que el Barça jugará ante el RCD Espanyol este fin de semana, el técnico vasco ha confesado que no esperaba que Aleñá se fuera a marchar justo antes de que se abriera el mercado de invierno.
"Ha salido Aleñá, realmente pensaba que si sucedía, no sería tan pronto. Él tenía esa posibilidad de salir porque su contrato así lo decía. De la misma manera que en agosto conseguimos que se quedara, pero ahora ha ejercido esa cláusula por la que podía salir. Ahora tenemos un jugador menos en esa posición y ya veremos qué ocurre. En principio, no pienso en ninguna salida más, no tengo por qué pensarlo. Contamos con los que tenemos y con los del B. Riqui Puig y los demás", ha expresado Ernesto Valverde.
Todo lo contrario le sucede a Rubi, el entrenador bético, que este viernes ha hablado de Aleñá también en la sala de prensa, antes del partido del Betis ante el Deportivo Alavés.
“El club se ha movido muy bien, ha estado muy ágil, y es un lujo de que tres días antes de que se abra el mercado lo puedas tener entrenando. Hemos ganado un tiempo muy importante. Le estoy viendo normal. Los compañeros le han ayudado a la integración. A nivel físico viene a su máximo nivel, y a nivel de la idea de juego no es igual, pero hay cosas que son parecidas, pues la voluntad de querer tener la pelota la tenemos. Hemos estado horas reunidos para acelerarle en nuestra idea de juego, lo normal cuando llega cualquier jugador”, ha expresado.