Es inusual que un aficionado porte la bandera de un país del que no es su equipo, como ocurre con los aficionados del Celtic de Glasgow. Los hinchas del próximo rival europeo del Real Betis llevan consigo la bandera de Irlanda, pese a ser políticamente escoceses. Todo tiene su explicación y en las gradas del Celtic Park reside la respuesta.
Se suele decir que donde exista un pub irlandés, siempre encontrarás a un aficionado del Celtic de Glasgow. Precisamente el origen de este club está en Irlanda, pues lo fundó un monje irlandés. El objetivo era recaudar fondos para ayudar a irlandeses en situación de pobreza. Por ello, la mayor parte de aficionados que pueblan las gradas del Celtic Park son escoceses católicos e irlandeses inmigrantes, que no se sienten identificados con Reino Unido. Además, el color de su camiseta, verde y blanco, está asociado a la bandera irlandesa. Al igual que su escudo, que representa a Irlanda con el clásico trébol de cuatro hojas.
Por otra parte, los casuals (hooligans) del equipo verdiblanco, la Green Brigade, tienen una tendencia ideológica que les lleva a ondear banderas relacionadas con causas independentistas. De modo que, en sus gradas pueden observarse desde banderas irlandesas hasta otro tipo de distintivo como el IRA o que represente la independencia de un estado o país.
De hecho, numerosos aficionados del equipo de Glasgow acuden los días de partido desde diversos puntos de Irlanda o Irlanda del Norte hasta llegar a Celtic Park. Los seguidores del que es el mayor representante del futbol escocés son conocidos, al margen de sus grandes desplazamientos a otras ciudades del continente europeo, por ser católicos irlandeses.
Todo comenzó el 22 de julio de 2014, cuando el Celtic recibía al FK Reikiavik islandés en el partido de ida de la ronda previa de la Champions League. Aquel partido no solo destacó por la goleada local de 4-0, sino que también por un suceso que ocurrió en las gradas del Celtic Park. Miles de aficionados exhibieron banderas palestinas durante el transcurso del encuentro. Dicho acto de solidaridad con el pueblo palestino, acarreó una sanción de 10.000 euros por parte de la UEFA.
Según su comunicado, el Celtic fue acusado de desplegar "bandeas ilícitas". Apoyándose en el artículo 16.2 apartado E, el cual prohíbe "el uso de gestos, palabras, objetos u otros medios para transmitir un mensaje no apropiado en un acontecimiento deportivo, especialmente mensajes que son políticos, ideológicos, religiosos, ofensivos o de una naturaleza provocadora". Posteriormente, ocurrió lo mismo en su partido contra el Hapoel Beer Sheva israelí, en la ronda previa de clasificación para la Liga de Campeones 2016-2017.
En primer lugar, hay que decir que las siglas IRA se corresponden con el Ejército Republicano Irlandés, a quienes algunos aficionados del Celtic de Glasgow expresan su apoyo republicano por mediación de cánticos en mitad de un partido. Concretamente tuvo lugar en el partido contra el Rennes de la Liga de Campeones de 2011. Los hinchas del Celtic realizaron una serie de cánticos a favor del ya mencionado grupo, cosa que no gustó en la UEFA. De modo que, se inició una investigación y el club fue multado con 12.700 libras. Aunque no fue la última vez que se escucharon este tipo de cánticos. En la SPL o primera división escocesa, también se dieron. Esta vez, la propia liga no tomó medidas al considerar que el Celtic tomó las suficientes medidas como para tratar de prevenir estos comportamientos.