Manuel Pellegrini, entrenador del Real Betis, valoraba el contundente triunfo de su equipo contra el Alavés. En su comparecencia tras el encuentro, dejaba una frase que mostraba la ambición del chileno pese a la evidente satisfacción. "Lo fundamental es que el equipo va mejorando. Creo que el equipo va mejorando, lleva un tiempo largo jugando a un muy buen nivel", decía.
Un mensaje que traslucía el deseo de seguir y no parar pese a los resultados positivos. "Hemos hecho en casa muy buenos partidos. Creo que el equipo dio una muestra de solidez. Es un equipo que piensa siempre en la portería contraria, hay que tratar de seguir esta dinámica porque el equipo cree mucho en lo que hace", relataba al ser cuestionado si el choque contra el Alavés ha sido el mejor desde que dirige al Betis.
Pellegrini, además, reconoció lo completo del partido. "Hicimos un partido muy completo, tanto en defensa como en ataque", dijo. El entrenador también mostró su confianza en el equipo para el futuro. "Por suerte, en mi carrera siempre me han gustado los desafíos. Si vine es porque creía que se podía hacer algo importante. Creo que el jugador está contento de cómo juega y eso es importante", comentó el entrenador del Betis.
Buenos días, haciendo un ejercicio de memoria recuerdo los que comparaban (negativamente, claro está) al Sr. Pellegrini con el Sr. Griguol, que en paz descanse. A los "exigentes" (albañiles, médicos, pintores, empresarios autónomos...) que se aventuraban en el oficio de entrenador y querían vender a precio de saldo a Carvalho, a Juanmi, a Tello, al Panda... incluso a Fekir. Había otros que no cesaban en su empeño de descabezar al Real Betis, de atacar sin tregua ni argumentos válidos al Sr.Haro y al Sr. López Catalán sin ofrecer alternativas y con la única premisa de "cuanto peor, mejor" sin descubrir el oscuro objetivo que perseguían. Los resultados malos vendrán, sin duda; esperemos todos, por el bien de nuestro Real Betis Balompié, sus secciones y nuestra Ciudad de Sevilla que, cómo los últimos mencionados, hagan un ejercicio de paciencia, saber estar y altura de miras.