El maratón de partidos del Betis de las últimas semanas, donde simultaneó las tres competiciones, acabó con un empate en Balaídos ante el Celta de Vigo. Un ejercicio de competitividad y oficio del equipo de Manuel Pellegrini al que le faltó chispa para hacer más daño a su rival, pero en el que tiró de madurez para rascar algo positivo en una tarde donde pesó el cansancio.
Probablemente el Betis, consciente de la tralla de la que venía con el viaje de Alemania y la prórroga europea, optimizó sus recursos y planteó un partido diferente a lo que lo viene siendo habitual. No fue un equipo tan vistoso como el de otras ocasiones, tampoco ese que presiona arriba en muchas fases de los encuentros. Capacidad de adaptación.
Tampoco conviene pasar por alto que el Betis no podía contar con Nabil Fekir sancionado. El francés es uno de los principales catalizadores del juego ofensivo bético. Eso unido a que Canales dio la impresión de jugar con una marcha menos, con algún gesto que invitaba a pensar que sufría alguna molestia, limitó las opciones de generar fútbol.
Así que el Betis se puso manos a la obra para ser un equipo sólido y dejar pocas fisuras al talento del Celta. Ahí brilló especialmente Marc Bartra, el mejor bético sobre el terreno de juego, que lideró una defensa donde Pezzella y las ayudas de Paul y Guido hicieron fuerte al equipo de Pellegrini. Sí pasó más apuros Miranda por su banda, aún falto de ritmo.
En ataque el Betis gozó de un par de ocasiones para Juanmi aunque en situaciones aisladas. Si en otros momentos el malagueño con poco marcaba, su racha no es la misma y pese a las interesantes maniobras no anotó. Por eso el marcador no se movió, pese a que en algunas fases el Celta inquietó más de lo deseado el área bética. Punto de oficio.
La alineación del Betis en Balaídos presentó seis cambios sobre la que jugó el jueves en Alemania. La primera fue en la portería, donde Claudio Bravo suplió al lesionado Rui Silva. Miranda, pese a las molestias físicas de los últimos días, se mantenía en el once inicial. Bellerín, Paul, William Carvalho, Juanmi y Borja Iglesias fueron las otras variaciones.
Canales dejó en los primeros instantes algunos gestos inquietantes que hacían pensar lo peor con una posible lesión. Sin embargo, el cántabro fue el primer gran protagonista del choque con un excepcional pase largo que remató Juanmi fuera por poco (4'). La primera llegada del Celta fue un cabezazo de Nolito que paró sin mayores problemas Bravo (9').
El Betis atravesó algunos minutos donde trató de controlar la pelota, aunque no duró demasiado ese gobierno de encuentro. Brais, Denis, Aspas y Fran Beltrán entraban en juego y armaban peligrosas acciones. Mina, también de cabeza, volvió a avisar (20') antes de un trallazo de Brais Méndez (28'). El cuadro bético echaba de menos que jugadores como Canales o Carvalho aparecieran más.
Con todo, Juanmi gozó de una nueva ocasión. El malagueño ejecutó una hábil maniobra con un recorte y se sacó un zapatazo ajustado que rozó el palo (29'). Sin embargo, los locales llegaban más insistiendo especialmente por la banda de Miranda en sus ataques. Pezzella y, especialmente, Bartra se multiplicaban demostrando concentración para solventar acciones que en algunas ocasiones venían precedidas de propias pérdidas del Betis.
Tras la reanudación no varió demasiado la tónica con un Betis que disponía de menos balón de lo que acostumbra. Claro que un simple destello de Canales generaba una interesante ocasión con Miranda como asistente y Juanmi al remate (51'). Atrás Bartra seguía siendo el mejor corrigiendo posiciones de otros compañeros para evitar males mayores.
Los de Pellegrini tenían algunas imprecisiones con la pelota que dificultaban llegar al área de Dituro. Una de las primeras veces que el Betis amasó la posesión con paciencia acabó con un duro disparo de Canales desde la frontal (59'). El cántabro se entonaba con pases interiores. Los verdiblancos jugaban más en campo contrario.
El dominio había virado y era heliopolitano con un mediocampo donde Carvalho y Canales entraban más en juego. Cierto es que el Celta no dejaba de intentarlo por su banda derecha. Para el cuarto de hora final Pellegrini apostó por Joaquín que suplió a Juanmi. Mientras, Hugo Mallo rozó el gol al rematar en el segundo palo una dejada (79'). Susto para el Betis.
Lainez entró por Canales para los minutos finales. Aspas hacía de las suyas con un disparo cruzado que se marchó fuera (84'). Galhardo, de cabeza, volvió a inquietar aunque respondió Bravo (87'). Pellegrini realizaba un nuevo movimiento con la entrada de Willian José por Borja Iglesias. Nada varió en lo sustancial y el partido acabó sin sobresaltos y con un punto para los verdiblancos.
Bueno, pues un punto más.