Joaquín Sánchez, capitán del Real Betis, coleccionó una nueva ovación como visitante que demuestra una vez más el carisma que atesora y el cariño que despierta incluso lejos del Benito Villamarín. En esta ocasión fue en Balaídos, donde el conjunto verdiblanco ha perdido este domingo contra el Celta de Vigo por 1-0.
Fue en el minuto 71 cuando Joaquín, junto con Aitor Ruibal, entraba en el campo. Salían Rodri y Montoya. Balaídos y los aficionados del Celta se pusieron en pie para recibir con sonoros aplausos al capitán del Betis, lo que deja claro la dimensión del portuense. Una situación que se repite allí donde acude a jugar el Betis con una de sus leyendas.
Luego el partido no fue el deseado para Joaquín, ya que el Betis sumó su segunda derrota de la temporada. El capitán se asoció en algunas ocasiones en la banda derecha con Aitor Ruibal, aunque no pudo fabrica el que hubiera sido gol del empate. El tanto de Gabri Veiga, en la primera mitad, acabó siendo determinante en el resultado.
Es querido y admirado en cualquier parte del mundo menos un una cuarta parte de esta Sevilla nuestra