Este domingo arrancaba el Mundial de Qatar. Una cita que tendrá a cinco representantes del Real Betis, lo que da buen ejemplo de lo bien que está haciendo las cosas el club en estos últimos años. Y algunos de ellos entran en la nómina de aspirantes a llevarse el trofeo, lo que les permitiría entrar en la historia de la entidad y sumarse al selecto club de los campeones del mundo que han jugado alguna vez en Heliópolis.
El primer campeón del mundo del Real Betis fue el guardameta Nery Alberto Pumpido. Este se proclamó vencedor con Argentina en el Mundial de 1986. Fue titular en los siete encuentros que disputó la albiceleste en México, jugando todos los minutos disputados y manteniendo su portería a cero en hasta tres ocasiones. Una selección plagada de leyendas como Maradona, Valdano, Ruggeri o Burruchaga entre otros. Dos años más tarde, en 1988, llegaría a Heliópolis.
Para ver al segundo campeón del mundo hay que remontarse hasta 2002, en Corea y Japón, cuando Brasil obtuvo su quinto y último mundial. Por aquel entonces Denilson sí que pertenecía al Betis (el único hasta ahora), llegando a participar en la final ante Alemania. Mucho antes, en 1998, pudo lograr su primer Mundial, pero Francia, la anfitriona, se lo arrebató.
El tercero sigue perteneciendo a la nómina del Real Betis. No es otro que Nabil Fekir, campeón del mundo con Francia en Rusia 2018. Sin embargo, y para desconocimiento de muchos, hay más jugadores que se han coronado en el fútbol mundial, aunque en otras categorías.
A los citados hay que sumar el Campeonato del Mundo que logró la selección sub 20 en 1990, en Nigeria. Aquel combinado tenía entre sus filas a Fernando Varela, quien luego hizo historia con el Real Betis ganando también la Copa de 2005. Un título que logró también Gabriel Humberto Calderón en 1979, cuando Argentina ganó el Mundial juvenil.
Y mucho antes, según relataba Manolo Rodríguez en los anales del club, alcanzó ese hito Carlos Cela, un delantero centro que militó en el Real Betis en las temporadas 1955-56 y 1956-57, cuando los verdiblancos, recién llegado a la presidencia Benito Villamarín, soñaban con el ascenso a la Primera División.
Cela se había proclamado campeón del mundo juvenil en 1954 con la selección española. De hecho, había sido el máximo goleador del torneo con seis tantos. Sin embargo, durante más de cuatro décadas los organismos deportivos no le dieron la importancia debida a este campeonato. No fue hasta el mes de enero de 1996 cuando la Real Federación Española de Fútbol reconoció que este torneo disputado en Alemania había tenido el rango de Campeonato Mundial organizado por FIFA y, justamente, homenajeó a los vencedores, haciéndole entrega a cada uno de los jugadores de un reloj de oro grabado en el que se recordaba aquella extraordinaria gesta.
Incluso se podría añadir un sexto jugador, Alfonso Pérez Muñoz, si se cuenta el oro de España en los JJOO de Barcelona 92, que viene a ser el Mundial de la sub23.
Denilson LA MENTIRA DEL BETIS DE LOPERA, por el que cerro hasta un banco, claro el de la plazoleta, que cierran de 14 a 19 pa poder dormir la siesta