Llegó libre y prometiendo ser el hombre que comandaría la defensa del Real Betis esta temporada. Luiz Felipe no falló. El central del conjunto verdiblanco celebra este miércoles su primer cumpleaños como jugador del Benito Villamarín con una sonrisa de oreja a oreja: recuperación, revalorización, importancia...
Su temporada no está siendo sencilla. Entre lesiones, expulsiones y polémicas, Luiz Felipe ha tenido que ver algunos encuentros desde la barrera, pero nada ha podido frenarle.
Desde que llegase al Betis, el zaguero ex de la Lazio ha disputado 21 encuentros y siempre que ha estado disponible ha sido carta indispensable para Manuel Pellegrini.
La irregularidad en el último tramo ha frenado su revalorización en números, pero la realidad es que Luiz Felipe es uno de los grandes atractivos del mercado de fichajes alrededor del Betis: su nombre, relacionado con multitud de equipos.
Recuperado de sus últimas molestias, el zaguero arranca la semana con la ilusión de poder estar en los 12 encuentros que restan esta temporada, con el único propósito de ayudar a su equipo a seguir escalando posiciones y, tal y como él mismo ha admitido, meter a las trece barras en la Champions League.
Condiciones tiene para ello. La confianza del Benito Villamarín, también. Y la de su entrenador ni se duda. Luiz Felipe llegó prometiendo ser el hombre fijo de la defensa y a menos que su físico o alguna polémica expulsión lo evite, el futuro de este Betis en lo que resta de temporada también depende -en gran parte- de sus botas.