Mayo comenzó de la mejor manera posible para el Betis. Después de un triste abril con una única victoria en seis partidos, el conjunto verdiblanco cosechó un triunfo que es oro molido en la pelea europea. El final de una preocupante sequía, que ahora debe tener continuidad, y que surgió en el momento preciso y de la verdad. Una señal de personalidad.
Ni la racha reciente de un Betis que atravesaba un evidente bajón, ni la maldita leyenda de los heliopolitanos en el Nuevo San Mamés -con nueve derrotas en nueve comparecencias-, ni la falta de centrales. Contra todo eso se sobrepusieron los de Pellegrini para afilar su candidatura a repetir en Europa por tercer año seguido, algo que nunca logró en la historia de la entidad.
El partido del Betis en Bilbao fue de personalidad, de convicción. Si no se tiene allí, difícilmente se puede salir con vida. Lo saben a la perfección los béticos de años anteriores, así que esta vez, con la lección bien aprendida, no hubo concesiones. Ni de inicios de partido, ni de expulsiones facilitadas a los árbitros, que ni mucho fueron todas este año.
Las piezas volvieron a encajar en el momento justo. Y eso que la alineación podía invitar a más de uno a dudar. El cambio en la portería o el delantero centro elegido, por ejemplo. Sin embargo, precisamente las respuestas de Bravo y Willian José fueron determinante. El chileno con intervenciones que valieron la victoria, el brasileño para reencontrarse con el gol en un remate acrobático.
También funcionó con nota alta la presencia de Paul en el centro de la zaga, pese a no ser su puesto natural. Todo fue fluyendo y el equipo mostró determinación. No quiere decir, ni mucho menos, que fuera un paseo. Porque el Athletic apretó, especialmente en la segunda parte, y el Betis respondió con firmeza y con capacidad de sufrimiento. Indispensable en el fútbol.
Por ocasiones, sí pudo haber igualdad. Un larguero de Paul, otro de Sancet y oportunidades en las dos porterías. Claro que lo que vale son los goles y ahí el Betis de las áreas, otras veces criticado con razón, venció. Agua de mayo en estos tiempos de sequía para un equipo que no podía esperar más a la reacción. Era ahora o nunca. Y fue ahora.
La oportunidad no se la niega Pellegrini, ocurre k están club y jugador negociando la renovación y x lo k se huele Paul, por medio del representante esta un tanto subidito, Ayer jugó el mejor encuentro k yo le recuerde, el lío es ver si la actitud de ayer la convierte en constante K por eso viene el tira y afloja de la renovación Espero k jugador y club lleguen a un buen acuerdo y disfrutemos todos
Apelo a Pellegrini, a que resetee la opinión que pueda tener de Paul, dado que estimo que como central, da perfectamente para el puesto y seguramente por delante de alguno de los jugadores actuales en ese puesto. Me cuesta trabajo pensar, que en los entrenamientos, este chico no haya demostrado al conjunto que es un central de facultades, que sus problemas en la medular, en la que quizás le falte variedad de trato con el balón, en el puesto de central, lo suple perfectamente con las condiciones fisicas que posee. Profesor dele una última oportunidad, que no tengamos que ver a este chico, en otro primera, dándonos un poco de rabia!