El Real Betis se jugaba media temporada en su visita al Nuevo San Mamés. Todo valía para sacar los tres puntos. Cualquier ayuda era buena si con eso ganaban los de Manuel Pellegrini. Y eso lo sabía la plantilla, consciente de la losa que habría supuesto caer ante el Athletic Club. El más claro ejemplo reside en el ritual que montó la familia de Andrés Guardado para que su equipo lograse algo positivo en tierras vascas. Y vaya si funcionó.
Ha sido Sandra de la Vega, la esposa del mexicano, quien compartía a través de sus redes sociales una curiosa conversación junto al jugador del Betis. En esa charla vía Whatsapp, la mujer le 'confesaba' haber montado un altar muy particular en su casa con la Virgen de Guadalupe, el Cristo del Gran Poder y la Virgen del Mayor Dolor y Traspaso. "No nos puede fallar", decía la propia Sandra.
Y finalmente funcionó. Ya después del partido era el propio Guardado quien le agradecía esa ayuda extra. "Amor, no falló la velita. Ganamos 1-0, no manches, increíble. Estarás dormida, pero gracias, te amo", respondía el futbolista mexicano. Un altar que brindó una ayuda extra al Real Betis, que logró en San Mamés uno de los triunfos más importantes de la temporada.
Eso se llama desconfianza plena en su marido y en Mibeti para ganar un partido de fútbol.