Fue hace meses cuando Andrés Guardado abandonó el Real Betis, pero el centrocampista mexicano -y sus familiares- aún recuerdan los colores verdiblancos. La última muestra, más allá de todas y cada una de las palabras de respeto que tuvo el exinternacional con el club, en la comunión del hijo del mediocampista: muchos detalles béticos... y una historia muy curiosa.
Un día muy especial. La fecha de su comunión siempre es un día recordado por los pequeños y Maximo, el hijo de Andrés Guardado, no quería que fuese diferente. Tal y como cuenta su padre, puedes ver el discurso íntegro en el vídeo superior de la noticia, el pequeño le pidió a su papá imágenes de fútbol para decorar la sala, pero lo que no esperaba el mexicano era lo que iba a suceder.
En un salón decorado al 100% con fotos de Andrés Guardado con la selección y con el Real Betis, club con el que incluso muestra alguna foto celebrando la Copa del Rey, el exverdiblanco agarra a su hijo y lo explica.
"Él me pidió cosas de fútbol, a él le gusta Mbappé (aparece con su camiseta en el vídeo), y le pregunté si quería fotos del francés, de Cristiano y esos, pero él me dijo que no, que quería de su papá", cuenta ante la emoción de los presentes.
Un bonito detalle, tanto por parte del pequeño como de su padre, que bien demuestra la admiración y el cariño creado, no solo como futbolista, por el que fuese capitán del Real Betis.
Su hijo siempre mirará con admiración a Mbappé, a Cristiano o a Leo Messi, pero también lo hará al recordar todo lo que su padre le regaló al fútbol durante todos estos años.
Grande Padre grande el hijo