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Bartra recoge cosecha

Marc Bartra en el partido Betis-Girona (foto: Kiko Hurtado).
ElDesmarque

Un gol a los seis minutos del estreno liguero del Real Betis ante el Girona en el Benito Villamarín (1-1) fue la recompensa a miles de horas de gimnasio y rehabilitación para el central Marc Bartra después de casi un año en el dique seco por una grave lesión en el tendón de Aquiles de la que fue operado en octubre del pasado año.

Cuando Bartra vio el centro milimétrico del francés Nabil Fekir al primer palo de la portería defendida por el argentino Paulo Gazzaniga no dudó en ir con todo y, cuando vio el balón dentro, explotó junto a los 54.000 aficionados del Betis que han sido testigos del calvario del zaguero de Sant Jaume dels Domenys, en el año de su regreso tras una etapa en el fútbol turco.

Había vuelto el tarraconense tras marcharse en agosto de 2022 al Trabzonspor después de cuatro años y medio en el Betis, aunque se lesionó en octubre de 2023 y, desde entonces y pese a su jerarquía y ascendencia en el vestuario bético, no había jugado en partido oficial hasta que en la noche de este domingo compartió el eje de la defensa junto a Diego Llorente.

Nivel en su vuelta

Además de las lógicas reservas por su estado físico, que se encargó pronto de despejar, Bartra y Llorente, llegado este año desde el Leeds inglés tras un año de cesión en la Roma, el eje de la zaga verdiblanca se estrenaba en el Villamarín tras las marchas del marroquí Chadi Riad al Crystal Palace, la del argentino Germán Pezzella al River Plate y la retirada del griego Sokratis Papastathopoulos, además de la lesión del canterano Nobel Mendy.

Antes del choque ante el Girona, se había oficializado la llegada del central brasileño Natan Bernardo de Souza cedido por el Nápoles italiano tras unas semanas en las que se había insistido en la necesidad de reforzar la parcela central de la defensa, aunque el veterano binomio Bartra-Llorente se encargó de disipar dudas.

En la previa del estreno liguero ante los gerundenses, el técnico chileno del Betis, Manuel Pellegrini, lo expresó con la claridad con que suele al afirmar que sólo había "dos centrales, Diego y Bartra", que "lo otro son especulaciones de lo que puede pasar y que "Mendy es un jugador del filial y encima le queda un mes largo".

Diego Llorente y Marc Bartra, ante el Girona (Foto: Kiko Hurtado).

A sus 33 años, el zaguero tarraconense no pudo empezar con mejor pie su sexta temporada en el Betis, al que llegó por vez primera en enero de 2018 procedente del Borussia de Dortmund y tras haberse formado en la cantera del Barcelona, equipo con el que debutó en Primera 2010 y en el que permaneció hasta el verano de 2016 cuando fue traspasado al conjunto alemán.

Su paso por la Superliga turca, en la que jugó una veintena de partidos tras los 146 con los que se fue del Betis tras ganar la Copa del Rey de 2022, lo truncó la grave crisis económica de un Trabzonspor obligado a oxigenar sus cuentas y a plantear las salidas de los sueldos más altos de la plantilla, entre ellas la del central.

El primer año en su vuelta a Heliópolis se lo pasó casi en blanco y el segundo no lo ha podido empezar con mejor pie con su gol, el octavo que anota con la camiseta del Betis, y los noventa minutos de un partido del que concluyó exultante que "jugar aquí y estar aquí es un privilegio".

La emoción de Bartra

"Llevo seis años aquí, he visto entrar y salir mucha gente importante, y el equipo ha respondido. La afición ha estado aquí, el Betis está por encima de todo, de cualquier individualidad. Los que acaban de llegar, están aportando, los que llevan un par de años están dando un pasito adelante y los que llevamos más tiempo, dándoles ese sentimiento de pertenencia", afirmó.

Para ese sentimiento, la ascendencia en el vestuario del central del Bajo Penedés es clave para el chileno Manuel Pellegrini junto a Isco Alarcón y Nabil Fekir o el regreso desde el Liverpool inglés del portero Adrián San Miguel tras la marcha de futbolistas que han pesado en las tripas del equipo como el meta Claudio Bravo o los argentinos Pezzella y Guido Rodríguez.

Marc Bartra, quien debutó con la selección española en noviembre de 2013 tras proclamarse campeón europeo con la sub-21, estuvo en la Eurocopa 2016 y participó en la fase de clasificación para el Mundial de Rusia 2018 y cuenta en su palmarés con cinco títulos de Liga, una Liga de Campeones, una Supercopa de Europa, un Mundial de Clubes, dos Copas del Rey, una Supercopa de España y una Copa de Alemania.

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