La polémica surgida entre aficionados del Real Betis tras la aparición de una bandera con la Cruz de Borgoña

Nuevos actores en una polémica conocida en el Real Betis. Durante las últimas semanas han sido múltiples los aficionados verdiblancos los que, a través de redes sociales, han denunciado la aparición de banderas con la Cruz de Borgoña en las gradas del Benito Villamarín. La situación ha llegado a la entidad que, a través de un comunicado, ha explicado su postura, situación que ha llevado a crear un ardiente debate entre teclados.

Fue hace días cuando diferentes cuentas de aficionados verdiblancos se organizaron para enviar varios correos electrónicos al Real Betis quejándose sobre la aparición de las mencionadas banderas y ha sido este pasado viernes cuando el usuario @evaluquebi ha colgado en su cuenta de X una carta respuesta de la entidad sobre la polémica.

En el mismo comunicado, el Real Betis explica que "si bien es cierto que, durante los referidos encuentros por parte de un aficionado se ha exhibido una bandera con la Cruz de Borgoña (símbolo que no contraviene normativa alguna, hecho que se fundamentará más adelante), la bandera con la Cruz Celta únicamente fue exhibida durante uno de estos partidos, en un lapso infimo de tiempo, todo hay que decirlo".

"La afirmación contenida en su escrito, según la cual la Cruz de Borgoña estaría catalogada como símbolo de odio por la Policía Nacional, no se corresponde con la realidad, en tanto en cuanto que: Según el Manual de Simbología de la Oficina Nacional de Deportes (OND), que constituye la herramienta oficial para identificar y clasificar simbología asociada con violencia, racismo, xenofobia e intolerancia en eventos deportivos, no se incluye la Cruz de Borgoña como un símbolo susceptible de incitar al odio o a la violencia.

Este símbolo tiene una significación histórica y cultural que no está, por sí misma, asociada a conductas ilícitas. Por ello, su inclusión en el recinto deportivo debe interpretarse dentro del marco del derecho a la libertad de expresión, garantizado por el artículo 20 de la Constitución Española, siempre que no se emplee con fines contrarios al ordenamiento juridico.

Asimismo, debe señalarse que ni la Ley 19/2007 ni su normativa de desarrollo establecen un listado taxativo de símbolos prohibidos. En ausencia de un criterio normativo explícito, la actuación del Club se fundamenta en una estricta observancia de las indicaciones de las autoridades competentes y en la garantía de los derechos fundamentales de los aficionados", continúa explicando la entidad.

Finalmente, el Real Betis reitra su compromiso "con el estricto cumplimiento de la normativa vigente" y aclara que "no existe justificación legal suficiente para prohibir el acceso de una bandera con la Cruz de Borgoña al recinto deportivo, siempre y cuando no se demuestre una intención de incitar a la violencia o al odio".

La polémica llega más allá de aficionados del Real Betis

Toda esta polémica, que evidentemente tiene un trasfondo político, ha traspasado a la ciudad de Sevilla y en las últimas horas el conocido periodista Fonsi Loaiza ha cargado duramente contra el Real Betis.

En su perfil social de X ha publicado un duro mensaje asegurando que "el Real Betis apoya a los ultras neonazis de Supporters. Socios del club se habían quejado por la exhibición de banderas fascistas en el estadio. La respuesta del club ha sido defender a los nazis. Vergüenza".

Sumándose en ese mismo hilo Jaume d'Urgell, Secretario General de la Fundación Internacional de Derechos Humanos, asegurnado que "por desgracia, no es la primera vez".