Uno por uno del Betis contra el Leganés: notas épicas para llamar a la Champions

El Real Betis está de moda. O al menos eso dicen sus resultados. Los pupilos de Manuel Pellegrini lograron una remontada épica ante el Leganés (2-3), gracias a los goles de Isco Alarcón, Bakambu y Cucho Hernández, lo que les permite meterse de lleno en la pelea por la Champions. Ya depende de sí mismo para agarrar esa quinta plaza -el Villarreal debe visitar el Villamarín-. Casi nada...

En ElDesmarque ponemos nota a los jugadores del Real Betis.

Cal y arena en el Betis

Adrián San Miguel (3): El árbitro le perdonó una clara pena máxima por golpear de manera incomprensible a dani Raba. Quizás una mano más dura habría evitado el 1-0. Esa salida en falso en el 90...

Sabaly (4): Invisible. Sorprende que un fubolista de su regularidad fuese tan intrascendente. Comedido en coberturas ofensivas y ramplón a la hora de fajarse en defensa. El entrenador lo quitó a la media hora.

Natan (3): Cometió un gravísimo error que le costó caro al Betis. Una acción que evidentemente condiciona su partido.

Diego Llorente (4): Cuando menos sorprendente que cometa tantas desconexiones en un partido. Ese error en la marca del 2-0, habilitando tantos espacios al rival, es impropio de su nivel. Al menos de lo demostrado hasta ahora.

Perraud (3): Que Ricardo Rodríguez, desahuciado hace unos meses, esté infinitamente mejor no es buena señal desde luego. Un chasco absoluto lo del francés. Lo intenta, le pone ganas... pero no acierta una. Ni arriba ni en defensa.

Pablo Fornals (5): Fue el único que daba opciones de pase para progresar, con cierta intuición para atacar las espaldas de los centrocampistas rivales. El único que arrojó algo de luz en la primera mitad.

Sergi Altimira (6): Es evidente que la ausencia de Johnny Cardoso le resta solidez al centro del campo y eso le dejó en muchas ocasiones solo ante el peligro. Aun así no se arrugó. Sigue dejando destellos de una calidad impresionante. Con una personalidad tremenda. Llegará lejos.

Isco (7): Hasta en los días grises le brinda brillo al equipo. Sin tener incidencia directa, sin tener el acierto de otras tardes, sin que el equipo acompañe... Una acción de peligro y un gol. Para que se lo haga mirar Luis de la Fuente...

Antony (7): Su implicación es una bendición para el Real Betis. Nunca se cansa de correr. Hasta en los malos momentos, cuando menos acompaña el partido, hasta ahí le aporta cosas al equipo. Compromiso, jerarquía, apremio, ganas... Él lanzó el contragolpe del 2-3.

Ez Abde (2): La nada más absoluta. Ya no es que no acierte en la toma de decisiones, es que no acierta casi nunca. No hizo prácticamente nada bien. Se arrugó, se escondió y cada vez que la tuvo se dio la vuelta. Insostenible.

Cucho Hernández (7): Justo antes del gol este servidor escribió que va diluyéndose con el paso de las semanas. Que lee muy bien los partidos, pero que se le sigue resistiendo el gol. Y qué cosas, cambió el partido. Lo merecía ya.

Los suplentes marcan la diferencia

Jesús Rodríguez (5): Le dio al equipo el descaro, el vértigo y la picardía que necesitaba en los compases finales. Lástima ese error en el mano a mano con Dmitrovic.

Aitor Ruibal (6): Compromiso, coraje, arrojo, lucha, esfuerzo físico... Todo lo que necesitaba el Betis con el marcador cuesta arriba.

Bakambu (9): Unos minutos le bastaron para demostrar que debe ser titular en este Betis. Para demostrar que está un paso -o dos- por delante de Cucho. Provocó el penalti que mantuvo vivas las opciones de su equipo... y luego marcó el tanto del empate.

Marc Bartra (7): Inconmensurable. Hizo lo que reclamaba el contexto del partido. Achicó balones, peleó por alto y se mantuvo firme en defensa.

William Carvalho (5): Regresó a un terreno de juego seis meses después de su lesió. Se llevó los aplausos del respetable. Su regreso le vendrá como agua de mayo al equipo.

Manuel Pellegrini (8): Otra másterclass del entrenador. Cambiar un partido desde el banquillo vale mucho dinero y eso marcó la diferencia ante el Leganés. Para el que señalase su inmovilismo. Cambio de sistema, dos delanteros y a soñar con la Champions. ¿Qué más se puede pedir?