Sergio Ramos ya ha comunicado al presidente del Real Madrid que escuche las ofertas que están llegando y quq quiere marcharse este mismo verano. Uno de los candidatos, el principal, que más apuesta por el sevillano es el Manchester United, que ya hay pedido una exigencia al jugador: hacer pública su intención de dejar el equipo.
El United, que habría puesto ya sobre la mesa del presidente Florentino Pérez unos 50 millones de euros (más de 30 millones de libras), espera que el internacional español cumpla con este requisito en las próximas horas para así acercar su fichaje. La mejor forma para tensar la cuerda que está a punto de romperse... si es que no se ha roto ya.
Mientras tanto, el dirigente blanco ha hablado con Ramos para calmar los ánimos lo más posible y le ha pedido que no teme decisiones por el momento. Será en el regreso tras las vacaciones cuando ambas partes se estrecharán la mano y el jugador renovará o tomarán un rumbo diferente.