El capitán del Real Madrid Sergio Ramos tuvo un bonito detalle antes de comenzar el partido ante el Sevilla al abrazar a su descubridor y mentor Joaquín Caparrós.
El central salió al Ramón Sánchez Pizjuán como suele ser habitual, entre silbidos de la grada, sobre todo de la zona norte del estadio. Parte de la afición sevillista sigue sin olvidar su marcha en 2005 al equipo blanco.
Precisamente, el hombre que le hizo debutar en Primera División en la 03/04, Joaquín Caparrós, dirigía por segunda vez en esta etapa al Sevilla. Antes de comenzar el choque, Ramos acudió al banquillo rival para abrazar a un técnico del que sólo ha tenido buenas palabras tras darle la alternativa como sevillista en Riazor aquel 1 de febrero de 2004.