El Real Madrid cayó por 73-60 en Montenegro ante el Buducnost Voli Podgorica, asfixiado por una defensa que le dejó en 60 puntos y que provocó hasta 18 pérdidas del equipo español, que encajó su cuarta derrota en esta Euroliga ante el antepenúltimo de la clasificación de la fase regular.
El Buducnost sumó su quinta victoria e hizo bueno el historial de su pabellón, el Moraca Sports Center, en el que esta temporada han caído el Baskonia, el CSKA Moscú y el Barça, con una buena defensa y rachas repartidas entre sus anotadores, con 14 puntos del estadounidense Norris Cole, 13 del pívot georgiano Goga Bitadze, 12 del americano Coty Clarke y 10 de Earl Clark y Edwin Jakson.
Por el Real Madrid, su dominio del rebote (38-34) no le sirvió para finalizar las jugadas, con un pobre acierto en los tiros de dos puntos (37%, 10 canastas de 27 intentos), fruto de la defensa montenegrina, con solo Sergio Llull con dos dígitos de puntuación, 10 tantos y 6 rebotes del 'combo' balear.
El conjunto montenegrino comenzó mandando, con un 7-0 inicial de la mano de sus tiradores, Norris Cole y Edwin Jackson, pero el Real Madrid supo rehacerse con un robo del sueco Jeffery Taylor en su defensa sobre Cole que acabó en canasta y un triple del esloveno Anthony Randolph para voltear el electrónico (9-10, min. 4).
Con un Llull que comenzó fallando más triples de los que acostumbra, el partido se centró en el duelo entre el pívot caboverdiano del Real Madrid Walter Tavares y la joven estrella local Bitadze (19 años), que se atrevió contra los 220 centímetros del pívot blanco y se llevó tres tapones, aunque logró sacar alguna falta durante un primer cuarto cerrado con ventaja local (19-15).
El Buducnost seguía haciendo camino de la mano de una gran defensa que mantenía seco al Real Madrid con ocho puntos prácticamente seguidos de Coty Clarke (27-17, min. 14), lo que obligó al técnico blanco Pablo Laso a parar y pedir a los suyos que movieran más el balón en ataque y dejaran de intentar triples infructuosos (3 de 13 en triples llevaba el Madrid hasta entonces).
Pero es que el conjunto balcánico tenía la zona permanentemente vigilada, inasequible para los interiores madridistas, y en cuanto recuperaba el balón salía a la carrera con los rapidísimos Cole y Jackson, lo que permitía al Buducnost marcharse al descanso con una ventaja cómoda de ocho tantos (36-28).
Dos triples de Cole y Clark recibieron al Real Madrid a su regreso de los vestuarios mientras el conjunto español sólo sumaba con tiros libres y llegó a verse quince puntos por debajo (49-34, min. 24).
Los intentos de reacción madridistas se encontraban siempre con la capacidad anotadora de los locales, aunque en el último minuto del tercer parcial, dos triples seguidos de Rudy Fernández y el argentino Facundo Campazzo acortaron la desventaja para mirar el último parcial con más optimismo (56-48).
Intentó encabezar la reacción madridista Trey Thompkins con un triple, pero respondió al instante con otro su compatriota de Buducnost James Bell. El conjunto montenegrino defendía fuerte, con ayudas, y capturaba rebotes bajo aro madridista que le permitía lograr segundas jugadas y retener su ventaja (67-53, min. 35).
Al buen momento del conjunto local se unían los intentos de canastas forzadas del Real Madrid, al que ni siquiera le entraban los lanzamientos de especialistas como Thompkins, lo que hacía imposible ponerse a tiro de un Buducnost que celebró por primera vez dos triunfos seguidos en esta Euroliga, ante el campeón de Europa.
- Ficha técnica:
73 - Buducnost Voli Podgorica (19+17+20+17): Cole (14), Jackson (10), Sehovic, Clark (10), Barovic (6) -quinteto inicial-, Bitadze (13), Gordic (5), Bell (3), Clarke (12) y Nikolic.
60 - Real Madrid (15+13+20+12): Llull (10), Causeur, Taylor (5), Randolph (3), Tavares (6) -quinteto inicial-, Rudy (8), Thompkins (9), Ayón (2), Campazzo (7), Deck (4), Reyes (4) y Prepelic (2).
Árbitros: Christos Christodoulou (GRE), Jakub Zamojski (POL) e Ingus Baumanis (LVA). Sin eliminados.
Incidencias: partido de la decimonovena jornada de la fase regular de la Euroliga disputado en el Moraca Sports Center de Podgorica (Montenegro), ante 5.262 espectadores.