El Real Madrid inició LaLiga Santander de la temporada 2019/20 enterrando sus malas estadísticas como visitante en Balaídos y firmando un triunfo en la competición doméstica lejos del Santiago Bernabéu, que no lograba desde el pasado 10 de marzo.
La última ocasión en la que el Real Madrid ganó en LaLiga como visitante fue en Pucela, goleando 1-4 al Real Valladolid, en el que fue el último partido al mando del equipo del argentino Santiago Solari.
El Real Madrid llegaba de perder todas sus opciones de título en las competiciones en las que mantenía esperanzas, tras una semana en la que fue eliminado del Barcelona en Copa del Rey, perdió también en una Liga en la que ya no tenía ninguna opción y cayó goleado de la Liga de Campeones frente al Ajax.
Valladolid fue la despedida ganando de Solari y la última ocasión que el Real Madrid venció a domicilio. Con Zinedine Zidane de vuelta en el banquillo, encaró cinco salidas sin una sola victoria. Encajó la primera derrota tras su regreso en Mestalla frente al Valencia (2-1), empató con triste imagen en Butaque ante el Leganés (1-1) y el Coliseum Alfonso Pérez ante el Getafe. Se marchó sonrojado de Vallecas, derrotado por un Rayo en descenso (1-0) y cerró su mala imagen de visitante cayendo en Anoeta con la Real Sociedad (3-1).
Cinco meses y siete días después, en el primer partido oficial de una nueva temporada, Zidane cambió el rumbo y su Real Madrid volvió a saborear un triunfo lejos de su estadio. Balaídos queda como el inicio del cambio y el inicio de una nueva etapa en un estadio al que tiene tomada la medida, donde ganó en Liga en diez de sus doce últimas visitas por un empate y una única derrota.