El Barça y el Real Madrid tienen necesidades defensivas. Porque ambos equipos han mostrado una tremenda fragilidad en la retaguardia en estas primeras jornadas de La Liga Santander, en las que ya han pinchado dos veces. Las dos escuadras están muy lejos de su mejor versión y han mostrado la necesidad de hacer retoques en la plantilla.
Y ya miran de reojo el mercado invernal para lanzarse a por el mismo futbolista. Porque, con sus líderes en la zaga ya muy veteranos, Gerard Piqué tiene 32 años y Sergio Ramos, 33, hace falta pensar en un relevo de garantías que pueda asumir su rol. Un rol que nadie en la plantilla a día de hoy parece preparado para tomar.
En el Camp Nou no ven a Clément Lenglet con tanta responsabilidad, mientras que la rodilla de Samuel Umtiti, que puede ser traspasado para hacer caja y hueco, preocupa. Jean-Clair Todibo, por su parte, está muy ‘verde’. Pero es que en el Santiago Bernabéu las cosas tampoco están mucho mejor, más bien todo lo contrario.
Allí, Raphaël Varane lleva varios cursos muy lejos de su mejor versión, mientas que Nacho Fernández está en un declive deportivo sin solución. Y Eder Militao no parece haber convencido a Zinedine Zidane en sus primeras semanas como jugador del Real. Por ello se habrían fijado en un jugador con liderazgo, determinación, experiencia y nivel.
Y ese no es otro que Kalidou Koulibaly, considerado uno de los mejores del planeta en su posición. Lleva muchas temporadas a un nivel soberbio en el Napoli, donde es intocable para Carlo Ancelotti. Por ello, no le dejarán salir fácilmente y pedirán unos 120 millones de euros por él.
En Chamartín, por otro lado, parecen haber dejado bastante olvidado a Virgil Van Dijk, que hace pocas horas sonaba muy fuerte. El motivo no es otro que las elevadas pretensiones del su club, el Liverpool, que pide mucho dinero.
Además, afirman que está muy cerca de renovar su contrato…