El Real Madrid inicia el nuevo año con deberes pendientes. Con nombres como los de James Rodríguez, Jesús Vallejo o Brahim Díaz en la recámara, el conjunto blanco ya ha marcado su primer gran debe del curso: buscar una solución para Mariano Díaz.
El delantero ex del Lyon volvió al Santiago Bernabéu el pasado año con Julen Lopetegui. Sus números en Francia ilusionaron a todos e incluso algunos le apuntaban como el encargado de 'hacer olvidar' los goles de Cristiano Ronaldo. Pero nada funcionó.
El proyecto de Lopetegui se derrumbó pronto y ni Solari ni Zidane contaron con él. El técnico francés, el actual inquilino del banquillo, le dejó claro en junio que no contaba con su figura, pero Mariano no quiso rendirse.
Seis meses después sus apariciones son nulas: no ha tenido minutos ni en LaLiga Santander ni en la Champions League y no tiene pinta de tener hueco en la Supercopa de España. Un auténtico calvario.
Con todo ello, en el Real Madrid saben que solucionar su situación se antoja como la primera gran operación del mercado de invierno. Su salida, a pesar de la falta de minutos, podría firmarse en una cantidad superior a los diez millones de euros -cerca de los 20- y más allá de aportar a la banca blanca, restará a Zidane problemas y cargas en el día a día.
En la entidad blanca no cuentan con él y el último gran fracaso de Florentino Pérez debe buscar una solución: comienza el mes definitivo, casi decisivo, en la carrera de Mariano Díaz. Ahora o nunca.