La situación en el Real Madrid ha dado un giro radical con la llegada de Martin Odegaard. El noruego, que tenía previsto seguir un año más en la Real Sociedad, donde había firmado una cesión de dos años, vuelve a la casa blanca por petición expresa de Zinedine Zidane y con jugadores claramente señalados. Entre ellos, Isco Alarcón.
El noruego llegaría al equipo de Zidane para tener protagonismo, ser importante en el centro del campo y competir un puesto con el malagueño. A pesar de la competencia, Isco Alarcón no se plantea salir del Real Madrid en busca de nuevos proyectos. Según publica el diario AS, Isco llamó a su llamó a su padre y representante para decirle que no iba a escuchar ofertas.
El entorno más directo del malagueño asegura que está acostumbrado a competir por un puesto en el equipo blanco y que siempre ha terminado jugador. "Está muy acostumbrado a disputar su puesto con cuatro o cinco compañeros y siempre ha terminado jugando", desvela el citado medio de su entorno.
Además, Isco termina contrato en 2022 y a pesar de que el Real Madrid todavía no se ha puesto en contacto con él, está en plazos de hacerlo, ya que el verano que viene entraría en su último año de contrato.
El segundo gran damnificado es Luka Modric. Salvo sorpresa mayúscula, el croata no se marchará este verano de la casa blanca, pero su situación de cara al futuro toma un nuevo matiz. Modric acaba contrato en 2021 y Odegaard se perfila como su sustituto natural. Esta temporada podría ser la del relevo generacional, pues el croata cumple 35 años el es que viene. La llegada del noruego parece perfilar su adiós para dentro de un año.