El gran desafío de Eden Hazard, liderar y triunfar en el Real Madrid, se inicia en el encuentro de la cuarta jornada de LaLiga Santander, la tercera en juego para el equipo de Zinedine Zidane, que recupera al astro belga con una mayor exigencia sobre sus espaldas una vez superado el primer año de adaptación y las lesiones de tobillo que lo frenaron.
El esperado regreso de Hazard se produce a puertas de octubre. Necesitaba parar de nuevo tras forzar para buscar la remontada en la Liga de Campeones ante el Manchester City. El desenlace fue negativo para el Real Madrid, que cayó eliminado, y para el jugador que acabó el curso con dolores fuertes en el tobillo operado. Las cortas vacaciones pero repletas de inactividad, provocaron un regreso fuera de peso y con mal físico. Debía recorrer un camino de entrenamientos hasta que su regreso se pudiese producir al cien por cien. Zidane entiende que ese momento ha llegado.
El Real Madrid se estrena de local en LaLiga Santander tras su primer triunfo de la temporada en la visita a un Real Betis que llegaba lanzado. Las pruebas tácticas de Zidane sorprendieron con un sistema con dos puntas que es poco probable que mantenga ante el Real Valladolid. Si Hazard ya está para jugar, su estatus invita a pensar que lo hará de inicio y se regresará al clásico 1-4-3-3 del técnico madridista.
El damnificado sería Martin Odegaard, sin brillo tras dos titularidades, y la novedad también sería el regreso al once del brasileño Vinicius. Zidane suma a las bajas de Militao y Mariano Díaz, la de Toni Kroos en el centro del campo por un percance muscular. Su ausencia dará continuidad a Fede Valverde, quien recuperó ante el Betis la imagen repleta de autoridad y físico. También regresa a la convocatoria Marcelo, una vez superadas unas molestias de espalda, y Marco Asensio tras un edema de rodilla.
El objetivo de crear un fortín en su estadio nace para un Real Madrid que en la conquista de la pasada Liga nunca cayó de local y cedió cuatro empates. Solo once goles recibidos en 19 jornadas son el techo a superar por Thibaut Courtois, que encajó dos tantos en Sevilla que perturbaron su regularidad en números pero no en un rendimiento regular.
El Real Valladolid acudirá al Di Stéfano sin miedo ni presión para, al menos, tratar de repetir el empate logrado la pasada temporada con un gol de Sergi Guardiola, que volverá a tener protagonismo ante el Real Madrid.
El entrenador del equipo, Sergio González, medita un cambio de sistema para volver al 1-4-4-2, dando entrada a Weissman o a Marcos André junto a Guardiola, o mantener el 1-4-2-3-1. Advirtió, en el inicio de Liga, que los primeros compromisos iban a servir para "alargar la pretemporada" y para seguir realizando pruebas y terminar de acoplar a jugadores, ya que siguen llegando incorporaciones, como la de El Yamiq, quien podría vivir su primer encuentro con el equipo blanquivioleta.
El jugador se consideraba "preparado" para jugar ante el Real Madrid, aunque será muy difícil que halle un hueco en el centro de la zaga del Real Valladolid, en la que parecen ir encontrando acomodo Bruno González y Javi Sánchez que, previsiblemente, iniciarán de nuevo este miércoles.
Sin apenas tiempo para recuperarse del último empate ante el Celta, en un partido en el que sintieron que "merecieron más", se enfrentan a uno de los grandes con el objetivo de seguir dando pasos en su proceso de crecimiento. Sergio piensa en su equipo, en cómo sacar el mejor partido a las virtudes de sus jugadores y de qué manera enmendar errores para buscar la sorpresa. Encara el partido con poco que perder y mucho que ganar, y por eso suele jugar estos duelos con más valentía.