En el estadio San Siro de Milán, donde hace cuatro años conquistó en final contra el Atlético de Madrid la undécima de sus trece UEFA Champions League, el Real Madriddoblegó 2-0 al Inter este miércoles y ganó una nueva "final", esta vez para dar un paso agigantado hacia la clasificación a los octavos de final de la Liga de Campeones.
Con un equipo plagado de ausencias, encabezadas por las del capitán Sergio Ramos y de Karim Benzema, el Madrid de Zinedine Zidane, que había definido este duelo como una final en la rueda de prensa de la víspera, sacó su mejor versión en su competición favorita y triunfó en Milán con goles del belga Eden Hazard, de penalti en el 7, y del brasileño Rodrygo Goes, en el 59 nada más salta al campo.
Tras llegar al doble enfrentamiento con el Inter con un solo punto en dos partidos, el Madrid ganó ida y vuelta ante el cuadro milanés y se colocó segundo en solitario en el grupo B, con siete puntos, uno menos que el líder Borussia Monchengladbach, con el que podría jugarse la primera posición en la sexta y última jornada.
El Inter se quedó colista con solo dos puntos, ya al borde de la eliminación, que sería su tercera consecutiva.
Se jugó en un ambiente dividido entre la incredulidad y el desconsuelo por el fallecimiento, a los sesenta años, del argentino Diego Armando Maradona, al que los dos equipos dedicaron un sentido minuto de silencio, vivido con emoción tanto en el césped como en los banquillos y en la grada de honor, donde estaba el vicepresidente interista, compatriota del Pibe de Oro, Javier Zanetti.
Tuvo el mérito de salir con concentración e ideas claras a nivel táctico el Madrid, que una vez más supo dar lo mejor de sí en los momentos de alta exigencia. Zidane confirmó al once de Villarreal y su equipo jugó con paciencia, moviendo el balón, combinando con calidad y presionando con orden.
El alemán Toni Kroos bajó su posición hasta la línea de centrales para construir juego, Odegaard fluctuó entre líneas y conectó con fluidez con Hazard, por la banda izquierda, y con Luka Modric. Nachó desactivó por completo a la delantera interista en la que apenas se notó el belga Romelu Lukaku.
Y en una larga acción madridista a los siete minutos, Hazard ganó un balón dividido con el eslovaco Milan Skriniar y combinó con Odegaard, quien dio un excelente pase al hueco a Nacho, derribado en el área por Nicoló Barella. El colegiado indicó la pena máxima y Hazard la transformó con potencia para dar una tempranera ventaja al Madrid.
Tocó con excelente técnica el cuadro de Zidane, que pudo hacer mucho más daño al Inter de tener más pegada. En el 13, Lucas Vázquez liberó un derechazo que, con Handanovic inmóvil, fue repelido por el poste, y tres minutos después, el francés Ferland Mendy desperdició una gran oportunidad tras un balón recuperado en tres cuartos por su equipo.
Estuvo bien centrado el Madrid, que solo arriesgó a la media hora, cuando unas indecisiones defensivas primero de Mendy y luego de Varane y Dani Carvajal ofrecieron una gran oportunidad a Vidal. El chileno fue anticipado en el momento de disparar a portería por Varane y protestó con vigor ante el colegiado Anthony Taylor. Tras ver la amarilla, siguió encarándole y le tocó con el pecho, lo que provocó la segunda amonestación y la expulsión.
Una roja que permitió al Madrid irse al descanso con una ventaja de un gol y de un hombre, ante un rival que todavía no había puesto en ningún apuro al meta belga Thibaut Courtois.
Pasó a un 4-4-1 el Inter en la reanudación, con el croata Ivan Perisic que sustituyó a un deslucido Lautaro Martínez y D'Ambrosio que reemplazó a Alessandro Bastoni. Su equipo tuvo una reacción de orgullo al comienzo de la reanudación, pero la superior técnica del Madrid prevalió.
Zidane esperó que se acercara la hora de juego para realizar sus cambios. Sacó la carta Rodrygo en el 58 por Mariano y su apuesta no pudo ser más acertada. Menos de un minuto después de pisar el césped, remató con la derecha un centro de Vázquez y dio una ventaja 2-0 al Madrid.
El chico formado en el Santos sigue brillando en las noches europeas. El de este miércoles fue su noveno partido y ya lleva seis goles y tres asistencias.
Su gol remató el partido. El Inter no tuvo fuerzas ni físicas ni mentales para buscar una remontada y su única oportunidad fue bloqueada por una gran parada de Courtois a Perisic, ante un Real Madrid que siguió jugando el balón, gestionando ritmos y esperando el pitido final para celebrar la primera victoria de su historia en San Siro contra el equipo interista.